El oxígeno es tóxico y aún así lo necesitamos para vivir

Es cultura general saber que respiramos oxígeno y que se trata de uno de los elementos que permiten que haya vida en el planeta. Aunque lo demos por sentado, se trata de algo extraordinario, ya que este gas es tóxico.

Resulta contradictorio que necesitemos un elemento tóxico para sobrevivir, pero que no salten las alarmas. Sí, el oxígeno es tóxico, pero cuando se encuentra en estado puro, sin presencia otros gases. El aire que respiramos contiene un 78% de nitrógeno, y solo un 21% de oxígeno. La intoxicación por oxígeno se da cuando lo respiramos en una concentración mayor de 60% durante varias horas.

Si pensamos en el efecto del oxígeno en otros objetos, podemos ver cómo les afecta. Los metales se cubren de óxido, y los alimentos se estropean. Nuestro cuerpo envejece por su contacto por el oxígeno, que genera radicales libres en nuestro cuerpo que lo llevan a funcionar peor.

Los seres vivos aerobios son los que necesitan el oxígeno para vivir. Este elemento genera mucha energía, que es la que pone en marcha los mecanismos corporales. Los restos de esa energía son los que tienen esos efectos negativos. La intoxicación por oxígeno es muy poco común, así que podemos seguir respirando con tranquilidad.