OCURRIÓ EN 1912

¿Y si el Titanic no se chocó contra un iceberg? Surge la teoría a raíz de nuevas imágenes

El barco más famoso de todos los tiempos chocó contra un iceberg y se hundió hace 111 años. Sin embargo, una recreación del Titanic pone en duda que los hechos sucedieran así.

El 14 de abril de 1912, el Titanic se hundió en el océano Atlántico. A día de hoy, las historias acerca de qué ocurrió y cómo siguen sin ser claras del todo. Además, ya no quedan supervivientes de esta catástrofe vivos, por lo que la labor de investigación se complica.

Atlantic Productions es una empresa que ha creado el proyecto Magellan, con el que ha creado una recreación digital del Titanic. Con este modelo planean "reescribir por completo todo lo que sabemos sobre la tragedia", explican en su web.

Se trata del proyecto en 3D bajo el agua más grande jamás realizado, ya que los científicos han cartografiado el Titanic en su totalidad. Han creado un modelo que muestra el barco con gran detalle y claridad, como se aprecia en el siguiente vídeo:

Sin embargo, esta expedición, llevada a cabo en 2022, deja todavía muchas incógnitas. "Todavía hay preguntas, preguntas básicas, que deben responderse sobre el barco", explicó a 'BBC' Parks Stephenson, analista del Titanic.

Una de las grandes preguntas es cómo se hundió. La historia más conocida es que se chocó contra un iceberg, pero eso aún no está del todo claro y el nuevo modelo puede ayudar a esclarecerlo. "Realmente no entendemos el carácter de la colisión con el iceberg. Ni siquiera sabemos si lo golpeó por el lado de estribor, como se muestra en todas las películas; podría haber aterrizado en el iceberg", continuó Stephenson.

Desde Atlantic Productions consideran que la toma de imágenes representaba varios desafíos. Este proceso del proyecto Magellan se realizó a los 3.800 metros de profundidad donde descansa el Titanic, y los científicos encargados tuvieron que prestar atención a las corrientes de agua y a no tocar nada de la embarcación para no dañar los restos del naufragio.

Otro inconveniente, según explicó el científico del proyecto Gerhard Seiffert, era "mapear cada centímetro cuadrado, incluso las partes poco interesantes, como en el campo de escombros, tienes que mapear el lodo, pero necesitas esto para completar entre todos estos objetos interesantes".