EVITA QUE CAIGAN EN MANOS DE TERCEROS

Qué hacer cuando tus contraseñas están entre las más “pirateadas”

Las contraseñas seguras son la base para preservar nuestra privacidad. Pero a veces las contraseñas que elegimos pueden llegar a ser demasiado obvias para los algoritmos que usan los hackers. Esto debes hacer para evitarlo.

ContraseñasNeONBRAND para Unsplash

Todos escribimos contraseñas a diario, ya sea porque nos estamos dando de alta en un servicio o plataforma, o bien porque es el propio navegador el que la autocompleta después de haberla memorizado. Y la realidad es que no siempre son las más seguras, sino todo lo contrario. Cada año aparecen listas con las contraseñas menos seguras que existen, y que son precisamente las más comunes y fáciles de averiguar. No sería de extrañar que tú o yo hayamos utilizado alguna vez una contraseña de este tipo. Por eso hoy nos hacemos eco de unas recomendaciones a seguir en el caso de que nuestras contraseñas sean de esas, comunes y fáciles de averiguar.

Cuando no prestamos atención a las contraseñas

Es algo lamentablemente más común de lo que pensamos. Y es que, según los expertos en ciberseguridad de ESET, las contraseñas obvias y fáciles de piratear se cuentan todavía por millones todos los años. Ya vimos el mes pasado algunas de ellas, y ahora nos recuerdan otras que siguen patrones comunes, como el de poner como una de estas con el nombre de nuestro equipo favorito de fútbol, el de una marca de moda, de artistas musicales, películas, coches, videojuegos, comida o incluso palabrotas. Todas ellas en su mayoría pueden ser averiguadas mucho antes que las contraseñas que se consideran seguras.

Las diez contraseñas más inseguras | Nordpass

Por poner un ejemplo, la contraseña con el nombre de un equipo de fútbol, como el “Estrella Roja de Belgrado” se ha utilizado más de 58 millones de veces, o el nombre del grupo de rock “U2” más de 33 millones de veces. Lo que nos da una idea de lo poco que nos trabajamos normalmente las contraseñas de las plataformas. Y a lo que vamos, qué hay que hacer cuando creamos una contraseña de este tipo, que no es segura, y nos damos cuenta que la que utilizamos se engloba dentro de ese grupo que puede ser considerado no seguro. Pues bien, a continuación, os contamos algunas claves a tener en cuenta para cambiar esto.

Así puedes hacerlas más seguras

Estos expertos en ciberseguridad nos dan unas pautas concretas para evitar en la medida de lo posible que estas contraseñas puedan ser averiguadas con facilidad. Algunas de estas recomendaciones son obvias, pero es que algunas veces se nos olvidan. Como por ejemplo que utilicemos combinaciones de caracteres más complejos y que sean únicos. Y por supuesto que nunca reutilicemos estas contraseñas, porque si lo hacemos nos arriesgamos a que averiguando una, puedan acceder a decenas de plataformas donde utilizamos la misma. Tampoco debemos compartirlas con nadie, y si es así, lógicamente a alguien de extrema confianza.

Los gestores de contraseñas son un buen método tanto para guardarlas como sobre todo para generarlas de forma segura. Por supuesto debemos activar la verificación en dos pasos, que nos permite contar con una capa de seguridad adicional. Pero hay otros aspectos importantes, como evitar conectarse a redes públicas, o a esas personas que miran desde nuestro hombro sin que nos demos cuenta. También puede ayudarnos el evitar los enlaces sospechosos, navegar por sitios seguros o acceder a servicios que nos adviertan de que nuestras contraseñas han sido comprometidas.