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CONSEJO
Uno de los errores más comunes que facilitan el trabajo a los hackers es mantener activado una de las funciones del router. Descubre por qué es crucial desactivarlo.
El WiFi, y por ende el router, se han convertido en elementos indispensables en nuestros hogares y oficinas, proporcionando la conexión a Internet necesaria para innumerables tareas diarias. Sin embargo, a pesar de su importancia, estos dispositivos son a menudo ignorados por los usuarios hasta que surge un problema de conexión.
Muchos desconocen las complejidades de estos dispositivos y cometen errores que pueden facilitar el trabajo de los hackers. Uno de los fallos más comunes es el mal uso del botón WPS (WiFi Protected Setup). Este botón, diseñado para facilitar la conexión de dispositivos sin necesidad de introducir una contraseña, puede ser una puerta abierta para ciberdelincuentes si se mantiene activado constantemente.
Si el botón WPS está siempre activo, cualquiera podría conectarse fácilmente a tu red WiFi. En el mejor de los casos, puede ser un vecino utilizando tu conexión, pero en el peor, un hacker podría infiltrarse en tu red. Una vez dentro, los ciberdelincuentes pueden desplegar aplicaciones o sistemas de espionaje que les permitan monitorear y controlar todo lo que haces en Internet, desde copiar contraseñas hasta clonar datos bancarios.
La ubicación del botón WPS varía según el modelo del router, pero generalmente se encuentra en la parte frontal, trasera o lateral del dispositivo y está etiquetado como WPS. En fundamental que este botón permanezca desactivado, excepto cuando realmente necesites usarlo. Puedes verificar su estado observando si la luz del apartado WPS está encendida o parpadeando.
Para garantizar la seguridad de tu red WiFi y proteger tu información personal y bancaria, asegúrate de desactivar el botón WPS y activar solo cuando sea necesario. Así, minimizarás el riesgo de ser víctima de un ciberataque.