PARA ESTE VERANO
Si eres amante del buceo y te encanta la vida submarina, a continuación te contamos 10 lugares que debes visitar en las Islas Baleares si quieres sumergirte bajo el agua y disfrutar de una buena inmersión.
Las Islas Baleares son uno de los lugares más bonitos de España para bucear, pues sus aguas cristalinas y su clima templado permiten disfrutar de inmersiones durante casi todo el año, explorando una biodiversidad marina impresionante, arrecifes de coral o formaciones rocosas. Además, su rica historia marítima ha dejado un legado de naufragios y restos sumergidos que convierten cada inmersión en una aventura de nuevos descubrimientos, tanto para expertos como para principiantes.
Aunque los escenarios submarinos de Ibiza son muy diversos, el barco Don Pedro es uno de los lugares más emblemáticos para los buceadores más experimentados, pues se trata del pecio más grande del Mediterráneo. Cuenta con cuatro posibles inmersiones a elegir en las que contemplar la belleza y los tesoros de la isla a más de 30 metros de profundidad.
Otra de las zonas favoritas de los buzos es el Dado Pequeño, precisamente la roca contra la que chocó el Don Pedro y que, además, alberga una gran vida marina gracias a especies como las anémonas amarillas, esponjas, julias, doncellas o gran variedad de algas.
Por otro lado, la Cueva de la Luz y las Columnas de Hércules destacan por sus acantilados, sus aguas templadas y su visibilidad, siendo el último un espacio diáfano adornado por colonias de pólipos rojizos.
Mallorca tiene alrededor de 70 lugares de buceo para todos los niveles. Uno de ellos es la Isla del Sec, una pequeña isla ubicada en la Bahía de Palma donde se encuentra un arrecife artificial creado por los naufragios de Clara, a 18 metros, y el Regis Maris, a 29 metros. Además, hay zonas de inmersión a menos de 30 metros, aptas para todo tipo de buceadores, y otras a 60 metros, solo accesibles para buceadores profesionales.
La isla es también un destino idóneo para aquellos que deseen probar el buceo por primera vez, pues existen diferentes escuelas que ofrecen la actividad del bautismo de buceo. En uno de estos centros, situado en Porto Cristo, se puede realizar una primera inmersión a poca profundidad (máximo 6 metros) con un instructor que guía a los nuevos buzos en todo momento.
La pequeña de las Islas Pitiusas es conocida entre los amantes del buceo por sus aguas cristalinas y su gran diversidad de fauna y flora marina. Situada cerca de unos acantilados en el noroeste de la isla, Punta Prima destaca por ser una de las inmersiones más verticales de Formentera, llegando a los 28 metros de profundidad y rodeada por un laberinto de rocas, grietas, túneles y pasadizos, así como por especies como pulpos, langostas, caballitos de mar e incluso rayas.
Para aquellos que estén iniciándose en el mundo del buceo, las Cuevas de Punta Rasa son el lugar adecuado. Situadas entre Cala Saona y el Cabo de Barbería, estas tienen 12 metros de profundidad y se encuentran separadas por amplios tramos de pared rocosa. Además, en su interior se crean burbujas de aire que dan lugar a un paisaje alucinante por el juego de luces azules y verdosas.
Menorca también ofrece algunos de los sitios de buceo más impresionantes del Mediterráneo. Uno de ellos es la Isla del Aire, situada cerca de la costa sureste de la isla. En esta pequeña isla, famosa por su icónico faro, los buceadores pueden explorar paisajes subacuáticos fascinantes, con formaciones rocosas y praderas de Posidonia oceánica.
Otro sitio imperdible en Menorca es El Arc de Llosa del Patró, una espectacular formación rocosa submarina en forma de arco. Este lugar no solo es perfecto para la fotografía submarina, sino que también ofrece una experiencia de buceo única debido a su diversidad biológica. Aquí, los buceadores pueden nadar entre bancos de peces multicolores y observar la vida marina que habita en las grietas y cavidades de las rocas. Y es que la claridad del agua en Menorca permite una visibilidad excepcional, haciendo de cada inmersión una experiencia inolvidable.