ARAGÓN
El Castillo de Peracense, ubicado en Teruel, es conocido por el peculiar color rojizo que tienen sus muros.
En España contamos, según la Asociación Española de Amigos de los Castillos, con un total de 10.200 castillos, la mayoría concentrados en Castilla y León, Castilla-La Mancha, Cataluña, Aragón y Jaén.
Todos ellos con sus peculiaridades, con su estilo, ubicación y construcciones diferentes (recuerda que en Viajestic tenemos una votación abierta para elegirel castillo más bonito de España). Un claro ejemplo de una original fortaleza es el Palacio Real de Olite, donde se rodó una serie americana.
Y ahora queremos hablaros de el Castillo de Peracense, conocido como la 'fortaleza roja' de Teruel. El castillo de Peracense es una fortaleza situada en la localidad aragonesa de Peracense (Teruel), se trata de uno de los castillos más originales y mejor conservados de Aragón, así como uno de los monumentos de mayor interés patrimonial y paisajístico de Teruel.
El Castillo de Peracense está declarado Bien de Interés Cultural y es conocido por su peculiar color rojizo de sus muros, que fueron construidos con el rodeno que se encontraba en la zona. Para su construcción, se aprovechó una prolongación rocosa de rodeno fuertemente escarpada para construir la fortificación, a unos 1400 metros sobre el nivel del mar. De esta forma, el castillo se mimetiza con la roca.
Así es el Castillo de Peracense por dentro
El Castillo de Peracense está formado por tres recintos concéntricos que se extienden a lo largo de 4000 metros cuadrados. En el recinto exterior destacan el muro, el almenado, las tres torres, el patio de armas y las escaleras de madera que llevan al adarve.
Desde el recinto intermedio, por su parte, puedes observar los restos de numerosos edificios de todo tipo, como una fábrica, un cementerio, una capilla, una cárcel y un almacén. En el recinto superior, que se encuentra en lo alto de un peñasco rocoso y que está dividido en tres terrazas sucesivas, podemos encontrar la Torre del Homenaje, varias estancias y el aljibe.
Una de las cosas más curiosidas del aljibe es su sistema de canalización, ya que el agua de la lluvia se recogía a través de una serie de canales excavados en la roca natural y la transportaban a las cisternas y aljibes también realizados en la roca. Uno de estos aljibes tiene cinco metros de profundidad y una capacidad para 4000 litros.
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