El pequeño pueblo de casas blancas que está a menos de dos horas de España conocido como "el Santorini portugués"

Santorini, a medio camino entre Atenas y Creta, es la isla griega por excelencia y la más meridional de las islas Cicladas. Miles de turistas quieren visitarla al año por su incomparable belleza, sus impresionantes vistas de la caldera, los extraordinarios colores de las rocas y las puestas de sol más románticas del lugar.

Por si no lo sabías, su curiosa forma, con la caldera en el centro de la isla, es el resultado de una erupción volcánica ocurrida hace 10.000 años que tuvo consecuencias desastrosas inmediatas, con el hundimiento de gran parte de la isla pero que se ha convertido en el motivo del turismo.

En todas partes del mundo se habla de Santorini y muchos países consideran que tienen un lugar parecido, como es el caso de Cadaqués, un pueblo de Cataluña considerado el "Santorini español". Y ahora queremos hablaros del "Santorini Portugués", el nombre con el que se conoce a Burgau, un pueblo de casas blancas del Algarve (Portugal).

Este pequeño pueblo pesquero pertenece al distrito de Vila do Bispo, situado en el perímetro del Parque Natural da Costa Vicentina, y cuenta con alrededor de 450 habitantes. Una de las cosas más destacables es su arquitectura, con casas blancas encaladas y estrechas calles adoquinadas que conducen a la playa.

La praia de Burgau es su atracción turística más importante, ya que está rodeada de altos acantilados y desaparece casi por completo cuando la marea está alta. Además, no te puedes perder la gastronomía de este antiguo puerto pesquero: Sardinas, pescado freso a la parilla o carne de las tierras altas. ¿Eres más de dulce? No te pierdas el bolinho de almendra, el mogardinho, los quejinhos o los Dom Rodrigos.