ITALIA
El Ponte Vecchio se ha convertido en un gran símbolo de la ciudad de Florencia. Descubramos su historia pero, sobre todo, algunas leyendas asociadas a sus datos más curiosos.
Florencia es una de las ciudades italianas con más encanto. Esto no es producto de la casualidad ya que, quien decide visitarla, recorrer sus calles y ver en persona sus imponentes edificaciones y monumentos, se queda completamente fascinado. Una de las construcciones que, año tras año, recibe más visitas es, sin lugar a dudas, el Ponte Vecchio.
De hecho, visitar Florencia y no fotografiarse en ese punto es un grandísimo error. Este sorprendente puente fue diseñado a modo de estructura defensiva. De hecho, contaba con dos torres en cada extremo (sumando cuatro en total). De esas fortificaciones, la única que sobrevive es la que está situada en el extremo sur de este puente.
Debido al lugar tan estratégico en el que estaba situado, el Ponte Vecchio fue el único fortificado de la ciudad. Un nombre importante en la historia de esta construcción es Cosimo I de Medici quien, en el año 1565, decidió construir sobre este puente el conocido como Corredor Vasariano.
Debemos tener en cuenta que, desde 1442, en el Ponte Vecchio tan solo se vendía carne pero, con la construcción de este Corredor, se prohibió este tipo de venta. De hecho, se construyeron esas joyerías que, a día de hoy, se conservan. ¡Ahí empezó una de sus tantas historias!
El Ponte Vecchio, a través de sus curiosidades y sus leyendas
Al ser un monumento tan visitado y con tantos siglos de antigüedad, es inevitable que cuente con un gran número de datos curiosos. Uno de ellos tiene una estrecha relación con sus ventanas, ya que una fila las tiene más grandes que el resto. Esto tiene que ver con Hitler.
Y es que en 1939, con motivo de su visita, Mussolini quiso dejarle impresionado con las vistas de Florencia desde este puente. Una leyenda vinculada a esta decisión, es que Hitler quedó impactado con esas vistas y, precisamente, ese fue el motivo por el que no destruyó el Ponte Vecchio durante la retirada de las tropas alemanas en el año 1944. Y es que este puente fue el único que sobrevivió de toda la ciudad.
Otro dato curioso relacionado con el Ponte Vecchio es que muchos son los enamorados que deciden sellar su amor en este romántico lugar. La leyenda asegura que, si pones un candado en el puente o en la estatua que encontrarás en él, el amor de esa pareja no desaparecerá jamás.
Lo cierto es que el Ayuntamiento, al ser consciente del aluvión de turistas que quieren comprobar si esa leyenda es cierta, ha tenido que tomar medidas. Y es que ha amenazado con poner multas entre 50 y 160 euros a quienes pusieran un candado. A pesar de la amenaza, hay quien sigue arriesgándose a hacerlo.
La mencionada estatua, a su vez, es uno de los sitios más fotografiados del Ponte Vecchio. Fue erigida en 1901 en honor a Benvenuto Cellini, y su objetivo era nada más y nada menos que rememorar el 400 cumpleaños del conocido orfebre. En la actualidad, también se ha convertido en todo un símbolo de la ciudad de Florencia.
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