¿SABES CUÁL ES?
Çatal Höyük es una aldea que surgió de 6700 a.C. hasta 5650 a.C en lo que ahora es Turquía y los investigadores la calificaron como la primera aldea del mundo. Te contamos más sobre su descubrimiento y cómo vivieron sus habitantes.
A pesar de estar casi ya en 2023, todavía hay mucchas cosas del mundo que están por explorar y descubrir. Recientemente os contábamos que el primer templo gótico de España está en Ávila. Se estima que en el mundo hay unas 500.000 ciudades pero... ¿Sabes cuál fue la primera aldea del planeta?
Según algunos historiadores, Çatalhöyük, también conocido como Çatal Höyük, Çatal Hüyük o Catal Hüyük, es la primera aldea del mundo. Además, en 2012 la UNESCO lo incluyó en la lista del Patrimonio de la Humanidad.
Está en Turquía y se trata de un antiguo asentamiento de los períodos neolítico y calcolítico, y el conjunto urbano más grande y mejor preservado de la época neolítica en el Oriente Próximo. Se encuentra al sur de la península de Anatolia, en la planicie de Konya, cerca de la actual ciudad de Konya (antigua Iconium) y aproximadamente a 140 km del volcán Hasan Dağ, en Turquía.
Çatal Höyük fue descubierto inicialmente en 1958, el sitio de Çatalhöyük no atrajo la atención mundial hasta las excavaciones de James Mellaart, llevadas a cabo entre 1961 y 1965, las cuales revelaron que esta región de Anatolia fue un foco de cultura avanzada durante el período Neolítico.
En ella se encontraron los elementos característicos básicos de una ciudad, como una religión organizada, una sociedad constituida por clases sociales y fuerzas laborales especializadas, y una población relativamente numerosa, con unos 6.000 habitantes.
Además, los edificios (construidos en ladrillo) estaban pegados unos a otros, sin calles entre medias y con muy pocos espacios abiertos entre ellos, y por eso los habitantes podían pasar de una casa a otra por la azotea y entrar en las casas por la parte de arriba, por una trampilla o por la puerta de un cuartucho construido en la propia azotea.
El desarrollo de esta civilización fue interrumpido bruscamente hacia el 5700 a. C. por un gran incendio, el cual coció el adobe y permitió que paredes de hasta tres metros quedaran en pie. La mayor parte del asentamiento fue destruido o abandonado.