El pueblo de pescadores en Barcelona poco masificado y con una playa ideal para ir con niños

Las vacaciones de verano dan lugar a abarrotadas playas en las que, a veces, es complicado poder descansar y desconectar. Por suerte, existen pequeños rincones más desconocidos a los que poder escaparse y disfrutar de la tranquilidad. Hace unos días os hablamos de una playa en Santander muy poco masificada, y hoy es el turno de la provincia de Barcelona.

A tan solo 40 minutos en coche de la capital catalana se localiza Sant Pol de Mar, un antiguo pueblo de pescadores. Su paisaje de casas blancas en plena orilla del mar y su rica gastronomía marina, lo convierte en un destino ideal que descubrir este verano. Entre esta arquitectura también podrás encontrar edificios románicos, neoclásicos, modernistas o novecentistas, así como otros construidos por los indianos que llegaban de América.

De hecho, en los meses de julio, agosto y septiembre podrás hacer varias visitas a las partes más típicas marineras de esta localidad. Recorrerás rincones como la Caseta dels Pescadors, el Salí de Can Serra o la Caseta del Motor de las barcas. Por su parte, en agosto también se llevan a cabo diferentes actividades que recuerdan a los antiguos oficios relacionados con el mar.

Sin embargo, no solo hay que destacar su casco urbano, sino también su costa. En especial, hay que resaltar el nombre de una de sus playas, la Playa La Murtra, con una extensión de 1.258 metros. Se trata de un lugar poco multitudinario y que se convierte en una opción perfecta para descansar en las vacaciones de verano. Cuenta con todo tipo de facilidades y servicios, como alquiler de sombrillas y hamacas, duchas o aseos.

Además, esta costa es perfecta para viajar con niños, debido al poco oleaje que hay y a la tranquilidad de sus aguas. Un destino insuperable para este verano y evitar la masificación de las playas.