Europa
Islandia tiene una geografía muy rica y diversa, desde volcanes a acantilados, cascadas y cráteres. Por su superficie y también por el interior de muchos de sus paisajes, discurren aguas geotérmicas que ofrecen multitud de posibilidades y de beneficios a todos aquellos que se bañan en ellas. Islandia en general es un lujo para los sentidos, la vista se deleita con sus increíbles paisajes y el resto lo hacen a su manera. Pero, sin duda, uno de los lugares más espectaculares y que más turistas atrae al cabo del año es la Laguna Azul o Blue Lagoon. Se trata de un balneario geotermal, un spa al aire libre que se encuentra en el campo de lava más reciente del país, a unos 39 kilómetros de Reikiavik, la capital. Su situación, en la parte oeste de la isla, en la península de Reikjanes, hace que esté bien comunicada con el aeropuerto internacional, a tan solo 13 kilómetros. Lo primero que llama la atención de Blue Lagoon es su característico e intenso color azul, totalmente natural. Además, sus columnas de humo y los chorros de vapor hacen sentirse a cualquiera en otro mundo, casi como si se hubiera viajado a un planeta diferente. El lugar fue descubierto de forma casual a finales de los años 70 y rápidamente fue reconocida por las propiedades medicinales que se descubrieron en sus aguas, recomendadas para curar varias enfermedades y mejorar otras tantas como por ejemplo la psoriasis. El barro del fondo del lago está compuesto por minerales como el azufre y el sílice blanco, que exfolian y limpian la piel de una manera suave y agradable, consiguiendo rejuvenecerla. También las algas de color azul verdoso del lago nutren la piel al mismo tiempo que, aplicadas sobre el cuerpo, consiguen un efecto relajante. Y todo esto ¡al aire libre! Blue Lagoon es el lugar perfecto para desconectar, un spa de auténtico lujo con un paisaje para admirar que deja sin palabras. El agua proviene de la central eléctrica de Svartsengi, que se encuentra al lado del lago, mezclada con el agua del océano que baja la temperatura. Durante todo el año, el lago está a 37-39ºC, por lo que se puede utilizar tanto en invierno como en verano. De todas formas, para habilitarlo, el balneario ha cubierto parte, creando así una piscina. La entrada a Blue Lagoon oscila entre los 38 y los 43 euros, dependiendo el mes del año; los niños menores de 13 años entran gratis, hasta 15 años tienen precio reducido y se pueden alquilar toallas. Un plan alternativo al aire libre, perfecto para realizar en familia o en pareja. ¿Te atreves a sumergirte en las aguas azules de Blue Lagoon?