Cascáis: Un paraíso de verano en la Costa del Sol de Portugal

Cuando muchos viajeros planean pasar unos días de vacaciones en la costa de Portugal, inmediatamente piensan en las playas del Algarve, situado en el sur de nuestro país vecino. Sin embargo, Cascáis es un destino soñado para todas aquellas personas que vuelan a Lisboa, pues cuenta con tres de los municipios costeros más ricos de la zona.

Cascáis es conocido también como la Costa del Sol de Portugal o incluso la Riviera Portuguesa (haciendo referencia a la famosa Riviera Francesa), ¿pero qué tienes que visitar y dónde tienes que alojarte exactamente para pasar un verano de ensueño en Cascais?

Sigue leyendo, que te contamos nuestra experiencia.

Qué ver en Cascáis

Lisboa, más allá su encantadora ciudad y del conocido municipio de Sintra (Patrimonio de la Humanidad según la UNESCO y donde encuentras el Palacio Da Pena), guarda un auténtico tesoro: La costa de Cascáis.

Cascáis cuenta con una gran variedad turística que visitar, como el Faro de Santa Marta, la Ciudadela, el Casco Antiguo (maravilloso de ver por la noche), el Puerto Deportivo (O la Marina, como allí la llaman), sus calles empedradas, sus casas con azulejos...

Pero Cascáis tiene mucho más que ofrecer como destino de verano. A pesar de que sus frías aguas proceden del Océano Atlántico, lo cierto es que sus playas no dejan indiferente a nadie. La playa de Cascáis, conocida como Praia da Rainha, cuenta con un Paseo Marítimo de unos 2 kilómetros que recorre la Praia Nossa Senhora Da Conceicao, Praia Duquesa y Praia da Rata hasta llegar a Estoril, donde está la famosa Praia do Tamariz.

Al otro lado de Cascáis, encontramos Boca do Inferno, un puente natural creado por la erosión del mar y que cuenta con una de las mejores puestas de sol de Portugal. Y más allá está la Praia da Cresmina y la Praia do Guincho (popular entre los amantes del windsurf)

Dónde alojarte en Cascáis

Durante nuestro viaje a Cascáis estuvimos alojados en The Oitavos, un hotel de 5 estrellas situado en el barrio rural de Quinta da Marinha y en el corazón del Parque Natural Sintra, en plena naturaleza y al mismo tiempo muy cerca del núcleo turístico costero. Este alojamiento de lujo cumple, sin duda, con todas las expectativas que cualquier viajero desea tener durante unas vacaciones de retiro, descanso y bienestar.

Meditación, golf, bici, yoga, surf, trekking, equitación e incluso una exclusiva ruta en barco por la costa de Cascáis desde donde puedes disfrutar de sus playas, un paisaje espectacular y un estupendo menú a bordo. Éstas son algunas de las actividades que ofrece el hotel, que también cuenta con una de zona de spa con balneario, sauna, baño turco y piscina climatizada. Pero si lo que quieres es descansar al aire libre, también tiene la piscina exterior, una infinity pool que da a las famosas Oitavos Dunes.

La elegancia, el entorno natural, el trato del personal y la arquitectura del hotel, perteneciente a la familia Champalimaud, cumplen a la perfección con el concepto de libertad que buscan sus huéspedes. Así, como las habitaciones, todas ellas exteriores, que invitan a relajarse y desconectar de la rutina gracias a la decoración y a las vistas al Océano Atlántico o al campo de golf.

Además, la gastronomía es uno de sus puntos fuertes, no solo por sus tres restaurantes (Ipsylon, Verbasco y Terraço) y su lounge bar, sino porque ofrece auténticas experiencias culinarias con los mejores productos de temporada de Portugal, con propuestas innovadoras y sabores exquisitos.

Dónde comer en Cascáis

Cascáis cuenta con una gran variedad de oferta gastronómica, desde restaurantes típicos portugueses hasta locales de otras nacionalidades y la gran mayoría se encuentran en el centro de la ciudad. Sin embargo, nuestra experiencia culinaria subió de nivel al probar las tres opciones que ofrece The Oitavos, todos ellas acompañadas por un experto sumiller. En el restaurante principal, Ipsylon, probamos la carne y el pescado fresco, como la presa de cerdo ibérico, así como los postres de su maestro pastelero, destacando la flor de chocolate.

Por otro lado, de Verbasco, el restaurante del club de golf, destacamos el famoso bacalao à brás pero con un toque original que lo diferencia del resto. Y para finalizar, Terraço, el lounge bar de la piscina, ofrece una variada selección de ensaladas y healthy food a los pies de la piscina, aportando una sensación de calma y relajación a la comida.

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