VIAJES DE CUENTO
El Castillo de la Bella Durmiente es uno de los elementos más fotografiados de Disneyland París.
El Castillo de la Bella Durmiente es, sin lugar a dudas, la estructura que más destaca en el parque de atracciones de Disneyland París. ¡Se ha convertido en todo un símbolo! Por eso se decidió remodelarlo para que estuviera listo en el 30 aniversario del mágico parque, contando con diversos expertos franceses que destacan en el mundo de la restauración.
Ahora bien, para crear este Castillo de 43 metros altura y un peso de 15 toneladas, se decidió incluir una serie de referencias de Francia. Un claro ejemplo lo encontramos en los jardines geométricos que rodean esta edificación, inspirados en los tapices de ‘La Dama y el Unicornio’ que podemos encontrar en el Musée de Cluny.
La silueta del propio Castillo nos hace recordar al Mont-Saint-Michel, pero también a aquellas ilustraciones de ‘Très Riches Heures du Duc de Berry’, reconocido manuscrito ilustrado de la Edad Media. ¡Pero no todo queda ahí! Y es que el patrón utilizado en las tejas es bastante similar al de los Hospices de Beaune.
Otra cuestión a tener en cuenta nos hace recordar al Castillo de Chambord, por esa inspiración que encontramos en la cúpula con vidrieras de la zona norte del Castillo de la Bella Durmiente. Después de todo, es más que evidente que estamos ante el momento perfecto para conocer esta edificación a través de una serie de datos curiosos.
¿Por qué hay 16 torres?
Tiene una explicación muy concreta: Esta es la edad con la que la joven Aurora se pinchó el dedo en la rueca que estaba encantada.
El Castillo alberga un dragón
Es el único de todos los parques Disney que tiene en su interior un dragón. De esta manera, es uno de los Audio-Animatronics más grandes que ha creado el equipo de Walt Disney Imagineering. En datos, este dragón mide nada más y nada menos que 24 metros y pesa un total de 2 toneladas.
El rosa destaca, pero tiene muchas tonalidades
Es una de las cuestiones que más llama la atención, puesto que se llegaron a utilizar hasta 14 tonalidades diferentes de rosa. Una elección perfecta puesto que contrasta, a la perfección, con los cielos grises de París. Como dato curioso, se utilizaron nada más y nada menos que 1.200 litros de pintura.
Si situación no es casualidad
El hecho de que el Castillo de la Bella Durmiente esté orientado al norte no es producto de la casualidad. Se decidió situar de esta manera para que el sol jamás estropease esta icónica fotografía desde Main Street, USA. A su vez, este punto del parque está inspirado en Marceline (Missouri). En este lugar vivió Walt Disney, pero también fue donde surgió su interés por el dibujo.
El Castillo se encuentra bajo el influjo del hechizo de Maléfica
Por lo tanto, las armaduras están dormidas. Si decides acercarte con cuidado a ellas podrás escucharlas roncar. Un dato curioso es que estos ronquidos están producidos tanto por el director artístico de Fantasyland (Tony Baxter) como el responsable de los efectos de sonido del parque (Don Leuis).
Unas vidrieras supervisadas por una leyenda
Estamos hablando de Paul Chapman, que trabajó tanto con la reina de Inglaterra como en la restauración de la Catedral de Notre Dame. Él se encargó de supervisar las preciosas vidrieras del castillo, a sus 80 años.
El cuervo de Maléfica guarda un secreto
El fiel compañero de la malvada Maléfica, situado junto a las armaduras, esconde un secreto muy peculiar. Aquellos que decidan fotografiarlo con flash, podrán ver sus ojos completamente rojos. Algo que, desde luego, no se aprecia al mirarlo.
¿Por qué hay caracoles en sus torres?
En las torres doradas del Castillo, en lugar de bolas, podemos encontrar un gran número de caracoles. Algo que llama poderosamente la atención. Se trata de un claro homenaje a Borgoña, donde son muy famosos.
El escudo de la familia Disney, presente en el castillo
Es algo que muy pocos descubren, pero sí que está presente. ¿Dónde? En un arco de piedra que está situado entre la tienda La Chaumière des Sept Nains y la parte más occidental del castillo.