Rutas
El Día de la Naturaleza, que se celebra el próximo 29 de abril, es el momento perfecto para que todo viajero disfrute del amplio abanico de rutas naturales que ofrece la capital nipona.
Tokio es una ciudad polifacética y cosmopolita en constante evolución que acoge a todo visitante con una única misión: hacerle disfrutar a cada paso con sus innumerables y diferentes atracciones turísticas. Tradición y tecnología son los contrastes más reconocidos de la metrópolis, pero también es característica por su inmensa naturaleza. Sus numerosas zonas naturales teñidas de color son un must para experimentar la verdadera esencia tokiota el próximo 29 de abril en el Día de la Naturaleza, ya que ofrecen infinidad de deportes para disfrutar al aire libre en la mejor compañía.
El abanico de posibilidades que se pueden realizar en la capital nipona es bastante amplio pero una de las sugerencias consiste en ascender al monte Takao donde disfrutar de un día de lo más entretenido está asegurado. Se localiza en la zona oeste de Tokio, en la cordillera de Kantō, y es característico por sus 599 metros de altitud, por su gran extensión arbolada y por ser un lugar de práctica del ascetismo shugen1 que cada vez gana más popularidad como montaña sagrada desde el periodo Edo2. El monte Takao tiene hasta 7 rutas muy variadas para senderismo -entre ellas la ruta Omotesando, Biwa-taki y Miharashi One- y una naturaleza espectacular en las cuatro estaciones.
Ruta Omotesando
Es la ruta destinada a aquellos turistas que nunca antes hayan visitado este lugar, ya que en él se podrá contemplar el templo Yakuo-in, donde descubrir historias tradicionales sobre los duendes tengu de nariz larga y las prácticas místicas para los yamabushi, o ascetas de la montaña. Además, una vez llegados a la cumbre el visitante observará la vegetación silvestre del parque Yasoen y las especies de monos que viven en el parque Saruen.
Ruta Biwa-taki
Es una ruta especialmente agradable para realizar en la temporada de verano, ya que consiste en ascender el monte siguiendo el transcurso de un riachuelo. La cascada “Biwa-taki” es la protagonista que se encuentra a medio camino, donde cabe la posibilidad de recibir enseñanzas sobre cómo purificarse siempre que se realice reserva previa. Un plan top para descubrir la más bella naturaleza de la capital nipona, rodearse del bosque de cedros y respirar aire puro acompañado de su familia o amigos.
Ruta Miharashi One
Esta ruta es característica por acceder a la cumbre de la montaña desde una parte diferente a la principal. Es muy popular por tratarse de un sendero que permite disfrutar de la panorámica mientras se asciende, dejando como guinda el descanso en una cafetería o disfrutar de las vistas desde el observatorio, donde, si las condiciones climatológicas lo permiten, el monte Fuji será otro de los espectáculos más deseados.
Y para terminar el día, qué mejor que descender de la montaña y saciar su apetito degustando la gastronomía típica de la zona. En el Monte Takao, que presume de abundantes aguas manantiales, se puede disfrutar deliciosos fideos soba, realizados con harina de trigo sarraceno y mucho mimo.
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