ESTARÁ EN LA MECA
El hotel más grande del mundo, que estará en La Meca, en el distrito Manafia y a escasos dos kilómetros de la Masjid al-Haram, la mezquita más sagrada del Islam y destino final de unos dos millones de peregrinos que participan en el Hajj cada año, finalmente estará concluido en 2018 –un año más tarde de la idea inicial–.
A día de hoy, el MGM Grand Hotel en Las Vegas, con 6.198 habitaciones, es el mayor hotel del mundo. Un récord que en breve será superado, y con creces, por el Abraj Kudai, en Arabia Saudí, que contará con la astronómica cifra de 10.000 habitaciones. Más es más parece ser el leitmotiv de todo lo que se hace o construye en Oriente Medio, con datos que asustan. Como ejemplo de lo que será el Abraj Kudai, valgan algunas cifras. Sobre una superficie de 60.000 metros cuadrados, tendrá una superficie total construida de aproximadamente 1,4 millones de metros cuadrados gracias a una altura de 45 pisos. Además de las 10.000 habitaciones, el establecimiento contará con 70 restaurantes, cuatro helipuertos, centro de convenciones, salón de baile de lujo, un centro comercial y doce torres dispuestas en anillo a modo de fortaleza en el desierto.Y por si esto no fuera suficiente, también batirá otro récord, ya que tendrá la cúpula más grande del mundo.
Diez de estas doce torres estarán clasificadas como hoteles de cuatro estrellas, mientras que las dos restantes estarán reservadas sólo para clientes especiales, y serán de cinco estrellas, aunque la apuesta es tener distintas áreas con servicio “seis estrellas” algo inalcanzable hasta ahora dentro de esas escalas. Como nota, cinco pisos estarán reservados para el uso exclusivo de la familia real saudí.
El coste estimado del proyecto, cuyo diseño está a cargo del estudio de arquitectura Dar Al-Handasah, también ha variado (aunque ese no parece suponer ningún problema) y ha pasado de unos 3.500 millones de dólares iniciales a 4.500 millones –financiados por el ministerio de Finanzas saudí–. “Con un tamaño sin precedentes, su distinguida ubicación, la exposición y el estilo arquitectónico, el edificio será un hito llamativo con una identidad profundamente multifuncional moderna, en relación tanto a su localización saudí como a la universalidad islámica de los usuarios previstos”, aseguran desde el estudio.
Los interiores del hotel serán adecuados a las líneas tradicionales árabes, aunque con la tecnología más puntera, pero sin apartarse de esos orígenes ancestrales de los árabes. Sin embargo, las críticas sobre el proyecto cada vez son mayores, como la del periódico The Guardian, que ha descrito su diseño “como algo que podría haber sido creado por un diseñador de Disneyland”.
Y no le falta razón. La Meca se está asemejando cada vez más a un parque de atracciones basado en edificios de récord y un lugar en el que la opulencia no conoce límites. Se trata de demostrar el poderío económico del país, ya que esta ciudad ya alberga el tercer edificio más alto del mundo –el más grande en tamaño por masa– y el más alto en Arabia Saudí, la torre de 601 metros Abraj Al-Bait. A ello hay que añadir que en la localidad de Yeda se está construyendo la Torre Yeda, también llamada Kingdom Tower, que tendrá será el edificio más alto del planeta, gracias a sus aproximadamente 1.000 metros de altura (será la primera torre en superar el kilómetro de alto) y que se prevé que esté finalizada entre 2019 y 2020. ¿Qué será lo próximo?