VILLA DE MADRID
Más allá del ajetreo de la ciudad, Madrid ofrece campo, lugares de paz, de naturaleza y de buen comer. Colmenar de Oreja es un destino genial para descubrir.
La curiosa Plaza Mayor de Colmenar de Oreja
La Plaza Mayor de Colmenar de Oreja, declarada Bien de Interés Cultural, se encuentra en el corazón del municipio. Una de sus características más llamativas es que está construida sobre un barranco a través de un sistema de puentes y deja bajo ella un arroyo.
Como curiosidad, puedes recorrer el túnel de Zacatín bajo la plaza y descender hasta la Fuente del Barranco, que data del siglo XVIII. ¡Encontrarás unas vistas increíbles con jardines llenos de terrazas que te transportan a otra época!
Un paseo por rutas que detienen el tiempo
En la Plaza del Mercado, junto a la Plaza Mayor, podemos disfrutar de la imponente iglesia de Santa María la Mayor, construida en el siglo XIII. Esta admirable construcción no pasa desapercibida debido a su aspecto de fortaleza. Además, cuenta con un presbiterio adornado con frescos de Ulpiano Checa.
Si te gusta pasear y quieres recorrer los rincones con más encanto de Colmenar de Oreja, puedes visitar la Ermita del Cristo del Humilladero, rodeada de un entorno único lleno de bonitos jardines.
Para los amantes de la gastronomía, el paseo por esta preciosa villa será un placer doble. Cuenta con exquisitos restaurantes de comida tradicional donde se puede disfrutar de sus platos típicos, como las patatas chulas, las pozas o el cabrito asado.
Su historia también está ligada a la tradición vinícola: el cultivo de los viñedos, las bodegas y la producción de blancos, rosados, tintos y espumosos.
Famosas canteras y otros oficios
El encanto de Colmenar de Oreja también se puede disfrutar fuera de sus fronteras, ya que de sus famosas canteras ha salido la piedra para construir los palacios reales de Madrid y de Aranjuez, así como innumerables monumentos de la ciudad de Madrid como la Puerta de Alcalá, el Banco de España, el Museo del Prado, la Catedral de la Almudena y el Teatro Real.
Actualmente, en la localidad queda rastro de otros oficios de antaño. Es el caso de los grandes hornos donde se cocían las tinajas que se exportaban a toda España. Esto supuso un importante desarrollo para la villa. También destacaron algunas otras labores artesanales como el trabajo con esparto o la elaboración de jabones.
Museo Ulpiano Checa
Los cuadros, que inspiraron películas míticas como Ben Hur y Quo Vadis, fueron pintados por Ulpiano Checa y pueden verse en el museo que Colmenar de Oreja ha dedicado al artista. Se trata de un espacio dedicado al que, sin duda, es el artista más universal de esta villa madrileña.
Aunque su obra abarca diversos géneros, destaca su pintura histórica, a la que dota de gran riqueza y dinamismo. El museo alberga gran cantidad de óleos, acuarelas, grabados o libros ilustrados por Checa, además de obras de referencia y documentación variada sobre su figura. Es una de las pinacotecas más sorprendentes de la Comunidad de Madrid.