Las estructuras podrán invertir hasta 175 millones de dólares sin ser sancionados
La FIA y la Fórmula 1 han mostrado las ideas básicas de su reglamento deportivo para la temporada 2021 entre las que incluyen numerosos recortes presupuestarios.
Si el cambio de monoplaza era toda una revolución para la Fórmula 1, los cambios en el reglamento deportivo para 2021 también pretenden traer cola. En una especie de decálogo reducido, Liberty Media y la FIA presentaban sus intenciones para la categoría en lo que ellos han bautizado como un nuevo prometedor comienzo. Además de coches que puedan pelear mejor sobre la pista, también pretenden que sean más los equipos que estén en dicha batalla por las victorias, apuntando que están en la búsqueda de “un deporte donde el éxito se determina más por lo bien que un equipo gasta su dinero, no cuánto gasta”.
De esta forma, una de las medidas estrellas en la nueva normativa viene introducida por un límite de costes por temporada que se situará en los 175 millones de dólares siempre y cuando el calendario tenga 21 Grandes Premios como el actual. De tener más, se ampliará dicho presupuesto en un millón de dólares por fin de semana, mientras que en este montante total no estarán incluidas ni las acciones comerciales de cada equipo, ni los sueldos de los pilotos, ni el de los tres grandes dirigentes o miembros claves de las estructuras, algo que previsiblemente puede llevar a alcanzar los 200 millones de dólares en las escuderías más potentes.
Tampoco se tendrán en cuenta otros gastos como los departamentos de conservación histórica que tienen algunos equipos como Williams, o los costes de propiedades como la factoría o los bonus que se les dan a los empleados por cumplir objetivos y gastos de inscripciones. El coste de comprar un acuerdo de suministro de motor para el cliente se ha limitado a 15 millones por temporada y tampoco se tendrá en cuenta en dicho total de 175 millones de dólares, así como los costos de vuelo y hotel para la carrera.
El que lo supere corre el riesgo de ser excluido:
¿Habrá penalizaciones? Sí. Los auditores Deloitte han sido nombrados para proporcionar supervisión independiente del cumplimiento de cada límite por parte de los equipos. En 2020 se introducirá de forma ficticia para ayudar a los equipos a adaptarse, pero será en 2021 cuando los equipos deberán presentar sus balances de gastos en dos plazos: entre enero y abril que será presentado en junio de cada año y el recuento de los gastos anuales, el cual se entregará antes de finales de marzo de la siguiente temporada.
Al que no lo cumpla se penalizará dependiendo del grado de infracción, diferenciando entre infracción de procedimiento, como un equipo que presenta sus cuentas tarde o de manera incorrecta, un incumplimiento menor del gasto excesivo, cuando el informe de un equipo muestra que han excedido el límite de costos en menos del 5 por ciento o la más grave, cuando se demuestra que se ha excedido dicho porcentaje.
También habrá tres tipos de sanciones, una financiera en forma de multa, una deportiva menor como reprimenda, deducción de puntos de constructores/pilotos, limitaciones de test y de costes o la prohibición de competir en algunas carreras. La más grave implicaría todo lo anterior además de la exclusión del Campeonato Mundial.
Fines de semanas más cortos, calendarios con más carreras:
Hay otras decisiones que también afectarán directamente a la reducción de costes. La FIA ha decidido implementar un formato reducido de fin de semana, por el cual se suprimen los jueves y las entrevistas y ruedas de prensa se pasan a la mañana del viernes. También se limitan los días de test durante la temporada a solo tres a partir de 2021, mientras que el régimen de Parque Cerrado será incluso más amplio al desarrollarse desde la FP3 en lugar de la sesión de clasificación, mientras que los equipos deberán utilizar desde ese punto la configuración presentada a escrutinio antes de la FP1.
De esta forma se reduce el número de piezas a probar durante el fin de semana, dando mucha importancia a las sesiones del viernes para poder poner a prueba las simulaciones de CFD y los datos obtenidos en un túnel del viento que también perderá peso en el desarrollo debido a la reducción de horas en las que se podrá hacer uso del mismo. Precisamente en los libres se introducirá una nueva normativa para que cada equipo de parrilla deba conceder al menos dos sesiones de entrenamientos libres por temporada a un conductor rookie con dos Grandes Premios o menos de experiencia. Con todo ello se pretende hacer hueco a una posible expansión del calendario por encima de las 24 citas por año, con un máximo de 25 marcado por el propio Ross Brawn.
Los equipos podrán seguir comprándose piezas:
Otro de los factores discutidos ha sido la posibilidad de estandarizar algunos elementos. Si bien los equipos han pedido que se mantengan el mayor número de áreas de diferenciación, los responsables de este reglamento han clasificado todos los elementos de los coches en diferentes categorías: LTC (piezas desarrolladas por cada equipo), SSC (piezas estándar para todos de un único suministrador), PDC (piezas con prescripciones), TRC (piezas que se podrán vender a otros equipos y las OSC (Open Source, piezas de equipos que deberán ser públicas a otros equipos)
Estas últimas darán libertad de desarrollo, pero limitarán el dinero invertido en su desarrollo constante por los equipos al estar sus especificaciones disponibles para todas las estructuras. Los equipos podrán seguir comprándose entre ellos los elementos TRC o PDC, por lo que la figura del equipo cliente no desaparecerá para facilitar a las escuderías con menos recursos poder optar a elementos competitivos como transmisiones o caja de cambios.