TRAS 20 AÑOS
Conocimos al icónico W12 de la marca británica en 2003, después de la adquisición de la empresa por parte de Volkswagen. Durante los últimos veinte años, se han construido más de 100.000 unidades para los diferentes modelos de Bentley. Ahora la electrificación manda y ha llegado el momento de despedirse de él
El inicio de una nueva era significa el final de otra. Si aplicamos esto a la historia de Bentley, nos encontramos con el primer capítulo de su trayectoria como marca eléctrica y con el último de su icónico W12. Este bloque ha sido el alma de los modelos de la firma británica desde 2003, pero para poder cumplir con los ambiciosos objetivos de emisiones que aparecen en el horizonte… deben prescindir de él.
Bentley electrificará completamente su gama a principios de la próxima década y el W12 no encaja en estos planes, que forman parte de la estrategia Beyond100. Con este plan, sólo lanzarán vehículos eléctricos (el primero llegará en 2025) e híbridos enchufables (basados en variantes de los V8 y V6 actuales). En 2030, la marca británica será totalmente eléctrica.
La fecha del fin: abril de 2024
Abril de 2024: dentro de poco más de un año, la producción del W12 llegará a su fin en las instalaciones que Bentley tiene en Crewe (Inglaterra). Como decíamos antes, este 6.0 con doble turbocompresor llegó, por primera vez, a la casa británica en 2003 tras la adquisición de la empresa por parte de Volkswagen.
Durante los últimos veinte años, se han construido más de 100.000 motores para varios de los modelos de Bentley. También se ha actualizado periódicamente: su potencia máxima ha aumentado un 37%, el par ha crecido un 54% y las emisiones se han reducido un 25%. Cada W12 requiere un proceso de, aproximadamente, 6,5 horas: tiempo en el que se construye y se prueba a mano por treinta especialistas.
Bentley Mulliner Batur: la despedida
Los libros de pedidos para los modelos con motor W12 se cerrarán en diciembre. Los clientes de la marca tienen a su disposición la variante de 650 CV en los Bentley Continental GT, Continental GT Mulliner, Flying Spur, Flying Spur Mulliner y Bentayga. El que ya no está disponible es el Bentley Mulliner Batur, que supondrá la gran despedida del mítico motor.
Los británicos únicamente fabricarán 18 unidades del Bentley Mulliner Batur, que ya están vendidas. No solamente supondrá el adiós del W12, también será el final del Bentley de producción más potente de la historia: hay que recordar que las modificaciones disparan su potencia hasta los 740 CV y el par máximo es de 1.000 Nm entre las 1.750 y las 5.000 rpm.
Y es que en su última evolución fue rediseñado desde el cárter y el motor fue calibrado para llegar a esas cifras. Incluye refrigeración mejorada, turbocompresores más eficientes, una combinación de admisión/turbo capaz de funcionar a temperaturas más bajas y un sistema que puede desconectar algunos de los cilindros cuando sea necesario.