NUEVA GENERACIÓN DE LA BERLINA EJECUTIVA ALEMANA
Mercedes-Benz presenta una nueva generación, completamente actualizada, de uno de sus modelos más conocidos: la nueva Clase E, que se renueva profundamente en un movimiento que, sin embargo, quiere retener a los usuarios más clásicos de la marca que buscan, eso sí, una carga tecnológica a la altura.
Mercedes-Benz ha sido siempre considerada una de las marcas líderes en el mercado de lujo, especialmente cuando se habla de berlinas ejecutivas. Su Clase E ha sido el perfecto equilibrio entre un vehículo representativo y uno con claras aptitudes ruteras, lo que lo convierte en un vehículo utilizable a diario. La nueva generación del Clase E representa la marca más "clásica" de Mercedes, que busca un coche viajero, rutero y que desprenda la imagen premium de la marca, pero que al mismo tiempo cuenta con la tecnología más avanzada instalada en sus modelos.
La nueva generación del Clase E es una especie de "puente" entre los modelos más clásicos y tradicionales de la marca alemana y los modelos que ya han dado el salto hacia una movilidad diferente, como la familia EQ con modelos como el EQE y el EQS. Con una longitud de 4,95 metros, el nuevo Clase E encarna a la perfección lo que supone conducir una berlina premium de gran tamaño.
Un diseño clásico, pero modernizado
El morro del coche es generoso y cuenta con una parrilla retroiluminada en todo su perfil, pero está disponible en una configuración más clásica que retiene incluso la icónica estrella de tres puntas en el capó. Los faros se integran en el frontal gracias a una máscara negra que envuelve la mencionada parrilla y que recuerda, una vez más, a los modelos EQ de la marca. La vista lateral es la más clásica, con tiradores eléctricos escamoteables y trazos suaves que buscan la elegancia por encima de la deportividad. Las llantas de aleación van desde las 18 hasta las 21 pulgadas.
La trasera es mucho más liviana que en anteriores generaciones, con una caída del techo más pronunciada y un portón del maletero más pequeño y más bajo. Los pilotos integran, también por primera vez en la marca, el logo de la estrella en forma de haz luminoso, otorgando un aspecto más moderno y dinámico al conjunto.
El interior de la nueva generación del Clase E es mucho más sólido tanto a la vista como al tacto, con una elección de materiales acertada. Es posible equipar tanto el salpicadero como las puertas y los asientos con cuero de alta calidad, aunque también es posible hacerlo con materiales que no son de origen animal, y para las molduras decorativas hay una selección de maderas y metales, muy en la línea con las últimas creaciones de Mercedes.
El habitáculo es mucho más tecnológico, con la digitalización como nota dominante. Las dos pantallas que siempre van a estar presentes son la de la instrumentación, con 12,3" de tamaño, y la de la consola central, aún más grande. A través de la lista de opciones es posible montar una segunda pantalla central para el acompañante en lo que Mercedes denomina "Superscreen" y un HUD de realidad aumentada muy similar al que monta el Clase S.
A nivel de espacio el Clase E puntúa alto: en la parte posterior la amplitud es notable, y dos ocupantes de talla grande viajarán con comodidad. Por su parte, el maletero alcanza los 540 litros en las versiones con motor térmico, reduciéndose hasta los 370 litros en las versiones híbridas enchufables. La gama de motores del Clase E arranca con bloques de únicamente cuatro cilindros que, o bien cuentan con microhibridación, o bien son híbridos enchufables con más de 100 km de autonomía.