¿Cómo cambiará el coche eléctrico nuestras vidas?

Sobre los coches eléctricos hemos hablado ya casi todo: de su tecnología, diseño, seguridad, baterías… Pero ¿os habéis preguntado alguna vez cómo van a cambiar nuestra vida diaria?

Para empezar, la forma de recargar el coche. A día de hoy, repostar combustible o gas se realizaba en un único lugar, en las estaciones de servicio. Pero, con los coches eléctricos llegan también nuevas formas de suministrar energía, abriendo un nuevo abanico de posibilidades y lugares en los que recargar la batería de nuestro coche.

Las podemos catalogar en tres puntos. Comenzamos por las estaciones o puntos de carga públicos: están disponibles 24 horas al día durante los siete días de la semana. En este caso, el coste de la recarga estará determinado por la tarifa vigente por kiloWatio-hora cargado, que se pagará, por norma general, a través de una App en nuestro Smartphone, conectada, obviamente, a nuestra tarjeta de crédito. Normalmente, la potencia de carga de este tipo de cargadores suele ser alta: de entre 50 y 150 kiloWatios, por lo que estaremos, como mínimo, cerca de 30 minutos cargando en esa red.

Desde nuestro hogar, parte el segundo grupo: las estaciones o puntos de carga privados. Como su propio nombre indica, solo están accesibles para personas autorizadas. El coste por kiloWatio-hora varía dependiendo de la tarifa contratada en cada caso.

Pero, cuando salimos de casa o del trabajo y queremos darle un 'chute' de energía a nuestro coche, también contamos con las estaciones o puntos de carga semipúblicos. En estos, el acceso sería, principalmente, para clientes de un tipo determinado de establecimiento, como por ejemplo grandes superficies. De forma general, el servicio de carga es gratuito, sirviendo como reclamo para los usuarios, ya que son los que encontramos en centros comerciales, parkings, restaurantes u hoteles.

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