Las etiquetas ambientales cambiarán en verano
Las etiquetas ambientales se han convertido ya en un argumento de compra más para aquellos que buscan cambiar su coche
Las etiquetas ambientales llegaron a mediados de 2016 a nuestras vidas de la mano de la Dirección General de Tráficocon el firme propósito de convertirse en un elemento más para organizar de manera efectiva el parque automovilístico patrio, permitiendo así diferentes discriminaciones positivas dependiendo del potencial contaminante del vehículo en cuestión.
En estos 4 años la industria automovilística ha evolucionado de manera sustancial, lo que ha hecho que surjan nuevas fórmulas técnicas para reducir el consumo de carburante y mejorar el rendimiento mecánicas, técnicas que, además, permiten que algunos vehículos accedan a los beneficios de una etiqueta ambiental más favorable aunque en la práctica su utilización y su funcionamiento no difiera del de un vehículo más simple.
El caso es que cuando un vehículo recibe una etiqueta, ésta ya es inamovible: todos los conductores que tenga ese vehículo a lo largo de su vida útil tendrán que lidiar con las ventajas e inconvenientes que suponga la clasificación ambiental correspondiente…excepto en dos casos. Sí, hay dos casos en los que un vehículo puede optar a mejorar su clasificación ambiental. ¿Cuáles son?
Error inicial en la clasificación por parte de la Administración
En un error de base por parte de las diferentes administraciones, las etiquetas ambientales se han otorgado en su mayoría basándose en el único dato de la matriculación del vehículo, cuando en realidad la norma dice que se tiene que utilizar la normativa anticontaminación correspondiente al año de homologación del vehículo.
De esta manera, se da el caso de que muchos vehículos matriculados justo antes del año “de corte” en el que se produce el salto de etiqueta reciben una etiqueta menos favorable. Este hecho se puede enmendar, pero tendrá que ser el propietario el que acuda a una jefatura de la DGT con toda la documentación del vehículo para que ésta actualice sus bases de datos.
Instalación de kit de gas GLP
Muchos vehículos con motor de gasolina son susceptibles de instalar un sistema de gas licuado de petróleo que permite reducir el consumo y las emisiones contaminantes. Cuando en un vehículo se instala un kit de éstas características y ha sido homologado inicialmente bajo una normativa anticontaminación Euro 4 o superior, pasa a recibir la etiqueta ECO de la DGT.