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El renting es cada vez una opción más utilizada por muchos conductores. ¿Qué ventajas y desventajas encontramos en esta alternativa durante 2022?
El renting es cada vez una opción más utilizada por muchos conductores, que pueden hacer uso de un vehículo personal despreocupándose de muchos factores asociados a la compra de un coche. ¿Qué ventajas y desventajas encontramos en esta alternativa durante 2022?
El renting es más parecido a un alquiler de larga duración que a una compra de un vehículo, esto tiene algunas ventajas. Por ejemplo, sólo tendremos que preocuparnos del pago mensual de tipo fijo y dentro del mismo habitualmente ya están incluidos todos los gastos del coche excepto el combustible. Esto incluye las posibles reparaciones, revisiones, cambios de neumáticos y el seguro, normalmente a todo riesgo con franquicia. Además, los impuestos como la ITV o servicios como la asistencia en carretera, ya están pagados.
El plazo habitual de este tipo de contratos es de 3 o 4 años, por lo que llegado a ese periodo podríamos ejecutar una opción de compra o incluso cambiar el modelo del coche por otro y reiniciar el contrato. De esta manera podríamos “estrenar un coche” cada pocos años. Además, los autónomos y empresas cuentan con una serie de ventajas fiscales.
¿Cuáles son las desventajas? En primer lugar, la más evidente es que el conductor nunca llega a ser el propietario del vehículo. El cliente nunca podrá elegir el taller de reparación, siempre deberá acudir al taller que indique la empresa de renting. Por norma general también existe una limitación de kilometraje anual que, al superarla, nos obligará a pagar una penalización.
Por último, el contrato no se puede anular durante su vigencia y el conductor no puede hacer ningún tipo de modificación al vehículo.