CON UNA COMPLETA DOTACIÓN DE SEGURIDAD Y CONFORT
La versión de entrada de este nuevo polivalente aterriza con promociones interesantes que lo convierten en uno de los coches más accesibles de su segmento aunque está acompañado de una motorización pensada para un uso exclusivamente urbano debido a su contenida potencia.
El Mitsubishi Colt inicia su comercialización oficialmente en estos días con las primeras entregas a los clientes. Si bien es cierto que desde hacía un mes ya se podían pedir en los concesionarios, es ahora cuando la marca ha comunicado las promociones que lo convierten en una alternativa muy interesante en el segmento B.
Ya sabes que el nuevo Mitsubishi Colt es un Renault Clio con otros logotipos y cinco años de garantía de serie. En la versión de entrada la mayor diferencia entre ambos está en el que el japonés hace uso del bloque 1.0 MPI con 65 CV mientras que el francés arranca con el más equilibrado 1.0 Turbo con 91 CV de potencia.
Con la motorización de tan solo 65 CV las prestaciones son bastante justas dado que no cuenta con la ayuda del turbo para conseguir una respuesta más briosa. Según declara la marca alcanza los 160 km/h de velocidad máxima y pasa de 0 a 100 km/h en 17,1 segundos. Si piensas salir a carretera compensa abonar los 1.200 € adicionales que cuesta el motor turbo de 91 CV.
El nivel de acabado más sencillo es el Motion. De serie cuenta con faros LED, sensores de parking delanteros y traseros, cámara de visión posterior, sensor de lluvia, encendido automático de luces, alerta de carril, lector de señales de tráfico, detector de peatones, fatiga y ciclistas, asistente en cuestas, etc.
También de serie son el climatizador automático, espejos y elevalunas eléctricos, acceso y arranque sin llave, sistema multimedia con pantalla de 7 pulgadas, radio DAB, Apple CarPlay, Android Auto, bluetooth, cargador de móvil por inducción, etc. Es por todo de los básicos más equipados del segmento y arranca en 15.190 € si se financia con la marca, siendo muy competitivo en todos los sentidos.