Renault cree que el precio de las batería caerá en picado en los próximos años

Bentley reconocía hace unas horas que el desarrollo de las baterías durante los dos últimos años ha sido prácticamente exponencial y que precisamente esta evolución ha permitido que se pueda pensar ya en la construcción de su primer vehículo eléctrico con los estándares que exige una compañía de lujo como lo es la británica. Sin embargo, hay vida más allá de los fabricantes Premium y la necesidad de hacer un parque automovilístico más sostenible implica precisamente que sean los productos más globales los que también se aprovechen de estos nuevos conceptos en baterías.

Renault ha querido plasmar este desarrollo de la tecnología del vehículo eléctrico también en su forma de ver el automóvil, apuntando que a finales de este mismo lustro se podría lograr una gran reducción en el precio de las baterías que favoreciera a su vez los costes de fabricación de cada vehículo, permitiendo de esta forma lograr productos más competitivos.

Según la alianza automotriz formada por Renault, Nissan y Mitsubishi, ese gran paso se podría traducir en una reducción del precio de las baterías en torno al 50% del costo actual, algo que podría aumentar hasta un 65% para el año 2028, justo a tiempo para esa gran transición planeada para 2030, año en el que además se espera que toda la oferta de turismos de la firma del rombo pase a estar compuesta únicamente por coches eléctricos.

De esta rebaja se podrían aprovechar los tres fabricantes pertenecientes a dicha alianza, ya que se pretende trabajar juntos en una estandarización lo máximo posible de las principales plataformas comunes. Las previsiones de esta unión entre Renault (incluidas Dacia y Alpine), Nissan y Mitsubishi apuntan a que un conjunto de plataformas podría servir ya para el 80% de todos los vehículos en 2026 dentro del grupo, algo que marcaría un gran aumento respecto al 60% que se calcular que hay actualmente.

Además, se realizará una fuerte apuesta económica en forma de inversión de 23.000 millones de euros en los próximos cinco años, montante que se añadiría a los 10.000 millones que se supone que ya llevan destinados a la electrificación. Para 2030 se espera que en los catálogos de los tres fabricantes nos encontremos con hasta 35 modelos completamente eléctricos, un 90% de ellos sobre la base de una de las cinco plataformas comunes de la Alianza. Todo esto será clave para la "democratización" del automóvil eléctrico.

Cabe apuntar que estas cinco arquitecturas base se componen de la CMF-EV (plataforma modular que entre otros utilizan el Nissan Ariya y el Mégane E-Tech Electric), la CMF-BEV para vehículos compactos como el nuevo Nissan Micra o el Renault 5, CMF-AEV, LCV-EV para vehículos comerciales o la Kei-EV para ultracompactos destinados al mercado asiático.