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El oeste peninsular, movilizado

Miles de personas salen a la calle para exigir la reapertura del tren Ruta de la Plata

En enero de 1985, los trenes dejaron de circular por la Ruta de la Plata, una línea ferroviaria que unía Sevilla con Gijón cruzando todo el oeste de nuestro país. Ciudades como Mérida, Plasencia, Salamanca o Astorga reclaman su vuelta y alegan que mejoraría el transporte de mercancías, pasajeros y hasta la conexión con Portugal.

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Este domingo se han vivido manifestaciones en una docena de ciudades españolas para pedir la recuperación del tren Ruta de la Plata, siendo la de Salamanca la más multitudinaria, con cientos de vecinos han aprovechado para reclamar las mejoras ferroviarias pendientes.

Estas movilizaciones también se han dado en Asturias, Extremadura y Andalucía, que estaban unidas por el ferrocarril hasta 1984. Concretamente, las manifestaciones han sido en cinco ciudades extremeñas -Plasencia, Cáceres, Mérida, Almendralejo y Zafra- que se han unido a Sevilla, Cádiz y Huelva, en Andalucía; Salamanca, Zamora y Astorga, en Castilla y León; y Gijón, en Asturias.

El tramo entre Astorga y Plasencia fue suprimido en 1985 para viajeros y en 1996 para mercancías. Ahora, 40 años después, numerosas plataformas ciudadanas piden que se incluya este corredor en la red básica de transporte que diseña la Unión Europea para que pueda volver a circular en 2040.

Más de 900 kilómetros de vías que cruzaban la península de norte a sur sin tener que pasar por Madrid. Después de todo este tiempo, hay lugares donde no quedan ni las cicatrices de las vías que un día los cruzaron.

Es la ruta para un ferrocarril que, casi medio siglo después, quiere volver a conectar lugares que un día quedaron fuera del mapa.

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