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SITUACIÓN PREOCUPANTE
La NASA asegura que España va camino de convertirse en un desierto.
Con más de la mitad del verano ya pasado podríamos decir que hemos estado ante el verano más caluroso vivido en mucho tiempo. Más personalmente, en el caso de España, la situación es bastante preocupante. Tanto que hasta la NASA ha avisado que nuestro país se enfrenta a una situación en la que los 50 grados podrían convertirse en algo normal de aquí a un tiempo.
Carlos del Castillo, jefe del laboratorio de ecología oceánica del Centro Goddard de Vuelo Espacial de la organización estadounidense, ha explicado en una entrevista la crisis climática que golpea al mundo y, en especial, a países como España. Según este científico, el país camina hacia la situación de soportar de manera habitual temperaturas por encima de los 50 grados, si no cambia una serie de patrones.
Bajo su criterio, y después de muchos estudios, las emisiones de gases con efecto invernadero tienen la clave del problema. "Seguimos emitiendo más gases a la atmósfera. Por eso no hay razón para penar que las temperaturas no van a seguir subiendo", ha asegurado.
Asimismo, ha puesto varios ejemplos de manifiesto como son algunas zonas de África y Asia que ya han instalado sus termómetros en estos extremos tan preocupantes y ha apuntado que España se acerca peligrosamente a temperaturas parecidas a las de las regiones más extremas del mundo.
De acuerdo con del Castillo, las autoridades españolas deben aplicar las tecnologías y las medidas correctoras que sean necesarias para erradicar este problema que irá en aumento en los próximos años. Y esto no solo tendrá los efectos antes mencionados, también habrá consecuencias en la salud y en la economía: las zonas turísticas de la costa Mediterránea sufrirán inundaciones, las aguas verán una mayor presencia de medusas y esto puede afectar la llegada de turistas. No solo en verano, también en un invierno que hasta ahora era el solaz de Europa.
La situación es tan grave que la NASA confirma que España va en camino de convertirse en un desierto.