MADRID
La Casita del Pescador del Buen Retiro es una de las edificaciones más sorprendentes que podemos encontrar en el madrileño parque. ¡No te dejará indiferente!
El Parque del Retiro es uno de los jardines públicos más espectaculares que podemos encontrar en todo el mundo. Tanto es así que se considera que es una de las principales atracciones turísticas de Madrid. Y es que cuenta con diversas figuras arquitectónicas así como edificaciones, que se erigieron desde el siglo XVII.
Cabe destacar que El Retiro se construyó en la primera mitad del mencionado siglo, dentro del proyecto para el Palacio del Buen Retiro. Estamos ante una posesión de la realeza que creó el Conde-duque de Olivares para el uso y disfrute del rey Felipe IV. En cuanto a su utilización como parque urbano, comenzó en el año 1767.
Por aquel entonces, el rey Carlos III permitió la entrada al público. Todo hasta que en el año 1868 pasó a las manos del Ayuntamiento de Madrid. Cabe destacar que el Parque del Retiro sufrió un gran número de destrozos durante la Guerra de la Independencia, que tuvo lugar entre 1808 y 1814. Por lo tanto, el aspecto que encontramos en la actualidad es el resultado de diversas modificaciones realizadas tanto en el siglo XIX como el siglo XX, aunque hay varios elementos originales.
¿Qué es la Casita del Pescador del Buen Retiro?
Estamos, sin lugar a dudas, ante uno de los tantos secretos que esconde el madrileño Parque del Retiro. Es una edificación que requiere observarla con detenimiento, ya que sorprende muchísimo a todo aquel que lo hace. La podemos encontrar en la parte noroeste del parque, muy cerquita de la Montaña Artificial.
Para conocer su historia debemos viajar a la primera parte del siglo XIX. Una vez tuvo lugar la Guerra de la Independencia, El Retiro quedó bastante dañado. Por ese mismo motivo, una de las tantas medidas que tomó Fernando VIII, fue la reconstrucción de este lugar tan icónico.
Debemos tener en cuenta que, durante esta etapa, se levantaron una serie de construcciones de lo más peculiares y exóticas. Una de ellas es el Salón Persa pero, también, encontramos la Casita del Pescador. A este tipo de obras, popularmente, eran conocidas como “caprichos”.
El encargado de diseñar esta Casita tan peculiar fue nada más y nada menos que Isidoro González. Lejos de quedarse solo en esta construcción, decidió rodearla de un precioso estanque para que esta casa cumpliera con el que es su verdadero objetivo. ¿Cuál era, exactamente?
En esta Casita del Pescador se alojaban el Rey y los miembros de la familia real para poder desconectar del estrés de la vida de palacio. Así pues, disfrutaban de diversas jornadas de pesca. Lo que no cabe duda es que esta edificación que podemos encontrar en el Parque del Retiro es verdaderamente coqueta y espectacular.
Destaca por su cuerpo rosáceo, sus pinturas, sus frescos y sus hornacinas. Durante muchos años estuvo completamente abandonada, al no contar con ninguna función específica. Con el paso del tiempo, pasó a ser una Oficina de Información Turística. En la actualidad, es el Centro de Información de Adopción de Animales de Compañía. Por lo tanto, estamos ante uno de esos tantos secretos del Parque del Retiro que, desde luego, ¡no deja indiferente a nadie!