ITALIA
El Anfiteatro Campano o Anfiteatro de Capua, sólo superado en tamaño por el Coliseo de Roma, fue utilizado como cantera.
No es ningún secreto que Italia es uno de los países que más llama la atención a los verdaderos amantes de la historia. Y siendo honestos, no es para menos. Si nos centramos en la zona de la antigua Capua, podemos encontrarnos con uno de sus grandes atractivos. Estamos hablando, cómo no, del Anfiteatro.
Está ubicado cerca de la Vía Apia, en la parte central de Santa María Capua Vertere. Debido a sus sorprendentes dimensiones, podemos decir que estamos ante uno de los Anfiteatros más grandes de todo el planeta. Únicamente superado por el conocidísimo Coliseo de Roma.
Anfiteatro de Capua, a través de su historia
Situado en Santa María Capua Vetere, fue construido entre finales del siglo I y principios del siglo II d.C. Su objetivo era remplazar ese Arena menos espacioso que databa de la edad de Graccana. Unos restos que, recientemente, se han encontrado en la parte sureste del actual Anfiteatro.
La historia de su construcción se conoce por algo tan concreto como una inscripción de Antonino Pio, que se conserva parcialmente en el Museo Provincial de Campania. De esta manera, queda mencionada la restauración de la columnata pero también de ese mobiliario escultórico que realizó el conocido emperador Adriano. Generalmente, el Anfiteatro de Padua se utilizó para diversos espectáculos de gladiadores. Originalmente constaba de los cuatro órdenes canónicos de terrazas, escaleras internas y externas en todos los niveles.
Una de las cuestiones a tener en cuenta es que el perímetro exterior de la platea del Anfiteatro estaba delimitado por diversas esculturas. De éstas, tan solo se conservan la de Hércules y la de Silvano. El paso del tiempo hizo de las suyas, ya que las partes ornamentales de este monumento quedaron destruidas a excepción de una Venus, el Adonis y un grupo de Cupido y Psique.
Otro punto a destacar es el suelo del Anfiteatro, que estaba formando por imponentes tablones de madera rociados con arena. Era la única manera que encontraban para poder llevar a cabo los diversos combates sin ningún tipo de inconveniente. Y es que, bajo esta arena, se encontraban los sótanos que estaban perfectamente comunicados entre sí por un gran número de pasillos.
De hecho, la entrada principal que permitía llegar al sótano del Anfiteatro de Capua y, de esta manera, llegar a las jaulas donde se encontraban los animales estaba situada al oeste. El año 456 d.C. fue clave, ya que el Anfiteatro fue destruido tras el devastador saqueo de Genseric. No fue hasta 530 d.C. cuando se procedió a la reparación.
Por aquel entonces seguía haciendo la vez de escenario de sangrientas batallas. Hasta que llegó el año 841 d.C., cuando los sarracenos destruyeron la ciudad. En ese preciso instante, esta construcción pasó a ser una fortaleza. Desde entonces, tuvo varios usos ya que llegó, incluso, a ser una cantera para poder construir otros edificios en la nueva ciudad.
Entre los años 1811 y 1860 se procedió a su excavación, pero no se retiró toda la tierra hasta, aproximadamente, 1930. Hecho por el cual se procedió a realizar numerosos procesos de restauración. Junto a este Anfiteatro de Capua podemos encontrar el conocido como Museo de los Gladiadores.
En él podemos encontrar diversas piezas de la decoración original de esta construcción, así como el molde del busto de Volturno entre otros tantos elementos. Entre ellos, las inscripciones honoríficas dedicadas tanto al emperador Adriano como al emperador Antonino Pio. Lo cierto es que es una visita más que obligada, en todos los sentidos. ¡No te dejará indiferente!
...
También te puede interesar...
La muralla romana de Lugo es la mejor conservada del mundo