NUEVA YORK
Por si no tuviésemos razones suficientes para viajar a Nueva York en las últimas semanas del año, la Estatua de la Libertad ha celebrado su 136 aniversario.
Fue el 28 de octubre de 1886 cuando la Estatua de la Libertad era inaugurada en la ciudad de Nueva York y se convertía en todo un símbolo de la ciudad y del país entero; han pasado nada menos de 136 años de aquella fecha y la razón y el sentido de esta estatua están hoy más vivos que nunca, por eso visitarla es obligado cuando viajamos a Nueva York, incluso cuando lo hacemos, como sucede en las últimas semanas de cualquier año, para ver el árbol de Rockefeller Center, la pista de patinaje que se instala junto a él o el espectacular desfile de Macy's, es decir, cuando lo hacemos para vivir una navidad a la americana.
Originalmente el sentido de esta estatua no era tan genérico como el que ha llegado a tener con el tiempo, cuando los franceses se la regalaron a los estadounidenses fue para celebrear el centenario de su independencia (y de paso meter el dedo en la yaga británica una vez más) pero con los años la famosa estatua se ha convertido en uno de los símbolos de la libertad más famosos del mundo, tal es su importancia que en 1984 fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO convirtiéndola así en un bien universal.
La famosa estatua está en la isla de la Libertad, al sur de la isla de Mahattan (que con tanto puente se nos olvida que es precisamente eso, una isla), junto a la desembocadura del río Hudson; fue, como decíamos antes, un regalo de Francia a Estados Unidos, toda una obra de arte diseñada y realiazada por el escultor Frédéric Auguste Bartholdi que contó con la colaboración de Alexander Gustave Eiffel, quien se ocupó del diseño de la estructura interna de la estatua.
La ubicación de la estatua no fue una elección al azar, se colocó en un lugar en el que se convertiría en la primera imagen de la ciudad que tendrían quienes llegaban al nuevo mundo desde Europa en barco (algo nada extraño hace 136 años...), de algún modo los estadounidenses se declaraban así libres ante quienes los visitaban...
¿Las cifras de la Estatua de la Libertad? La primera es 136, los años que lleva dando la bienvenida a los visitantes y recordando al mundo que ella es lo importante, la libertad (los franceses tienen a su Marianne, los americanos su estatua ¿y los españoles? a nuestra Clara Campoamor, por ejemplo); otra cifra: 46 metros de altura (de la antorcha hasta la base) y casi 93 si los medimos hasta el suelo. ¿Más cifras? pesa 225 toneladas y hay que subir más de 350 escalones para llegar hasta las 25 ventanas de su corona. Recibe más de 3 millones y medio de visitantes al año.
Algunas curiosidades: la Estatua de la Libertad fue también faro de Nueva York hasta el año 1902 y es todo un icono universal, aperece en un sinfín de películas (y las que le quedan...) y desapareció mágicamente... en realidad no se movió de donde está pero uno de los trucos de ilusionismo más espectaculares del mago David Copperfield consistía precisamente en eso, en hacerla desaparecer, lo hizo en 1983.
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