ALASKA
Se encuentran en Alaska y recorrerlas entre julio y septiembre es algo que nunca olvidarás.
El Glaciar Mendenhall es un glaciar de cerca de 19 kilómetros de longitud que se encuentra en el Valle Mendenhall, al sudeste de Alaska. Tiene una parte protegida, el llamado Lemdenhall Glacier Recreation Area, y esta se ubica en el Bosque Nacional Tongas. Pero no es lo único que tiene este glaciar. Lo cierto es que esconde otras cosas, como las cuevas de hielo de Mendenhall, que bien podríamos decir que es un mundo azul escondido en su interior.
La simple idea de descubrir estas cuevas puede resultar de lo más atractiva, pero la verdad es que se trata de un plan únicamente apto para los más aventureros. Porque recorrerlas no es nada sencillo. Al contrario, se trata de una actividad que solo pueden llevar a cabo quienes estén dispuestos a llegar hasta el borde del hielo a bordo de un kayak y después escalar por el glaciar.
Si todavía sigues leyendo estas líneas es porque te sigue llamando la atención la posibilidad de descubrir las cuevas de Mendenhall. Pues bien, en ese caso te diremos que lo más recomendable es que lo hagas con la compañía de un guía especializado, partiendo desde el centro de información turística ubicado en Mendenhall Loop Road.
No es que no sea posible hacer la excursión por libre, pero contar con el respaldo y la experiencia de un guía siempre hará más segura la aventura. Junto a esta persona que conoce bien la zona, se reducirá el peligro que pueda suponer adentrarse en unas cavernas de hielo que, según el momento, pueden estar algo derretidas y derrumbarse.
No te preocupes, no es algo que suceda a menudo, y como decíamos, los guías están para eso: para asegurarte que en el momento en que quieras descubrir el mundo azul que se esconde bajo el glaciar de Mendenhall, las cuevas son accesibles. ¿Y cuándo es más probable que esto suceda? Entre julio y septiembre; estos son los meses en los que suelen llevarse a cabo los recorridos por la cueva de hielo.
Si te preguntas si merece la pena recorrer estos túneles glaciares, lo cierto es que sí. En el interior del glaciar el azul brilla en un tono tan intenso como nunca hayas visto antes. Hay caminos y senderos de hielo glaciar y dos cascadas que se deslizan por la montaña adyacente. Todo es verdaderamente bonito, y lo es incluso más si la luz del sol se filtra por las paredes de hielo y hacen que todo brille con mayor intensidad.