Tenerife en primavera
La isla de Tenerife es un destino ideal para disfrutar en pareja, en familia o con amigos. La benignidad de su clima, sus playas, su gastronomía y sus gentes, son un atractivo para elegirlo como destino de vacaciones; pero en primavera nos dan nuevos motivos para visitarla.
Tenerife en primavera está llena de acontecimientos festivos: romerías, fiestas religiosas y festividades locales nos dan oportunidad de sentir el “ser” tinerfeño y sentir como propios el folclore y las tradiciones de la isla. Junto con los motivos religiosos en estas fiestas se promueven tradiciones agrícolas y ganaderas que constituyen el folclore y el sentir de sus habitantes.
Romería de Tegueste: es en honor a San marcos y se celebrará el domingo 5 de mayo. Folclore, música y procesiones conviven de la mano.
Fiesta de la Cruz: Se celebra en muchos municipios el 3 de mayo, coincidiendo con la fundación de la ciudad de Santa Cruz. La tradición indica que hay que adornar con flores y frutas el símbolo de la Cruz, creando un espectáculo de color y olor imposible de describir y que cambia cada año. Y además, en el municipio de los Realejos se produce una exhibición de fuegos artificiales totalmente espectacular.
La romería de Los Realejos: es en honor a San Isidro Labrador y ha sido declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional. Se celebra a finales de mayo y los vecinos se visten de magos y magas, los trajes típicos de campesinos de la isla. Se alegra con música de rondallas y las carretas decoradas con plantas y flores desfilan por las calles del municipio. Es típico comer sardinas y las famosas papas arrugadas y regarlo todo con buen vino de la zona.
Romería de la Orotava: Es de las fiestas más conocidas y se celebra el 30 de junio. Por la mañana se realiza la tradicional ofrenda de frutos del campo y renovación de la Promesa de los Labradores. Tras una misa se celebra la Procesión de los Santos Patronos hasta la Casa de los Balcones; una experiencia que los tinerfeños viven de una manera muy intensa.
La celebración del Corpus Christi: El 20 de junio se produce un espectáculo de color imposible de describir. Cada año se elaboran alfombras de flores y arena del Teide, que cubren las calles de los diferentes municipios de Tenerife. Una combinación de colores y texturas que recrea imágenes religiosas efímeras, ya que son destruidas por el paso de la procesión del Corpus. Es una herramienta de cohesión social porque en la elaboración de estas alfombras trabaja todo el pueblo: escolares, familias y asociaciones de vecinos se unen festivamente para su creación. Se utilizan toneladas de arena y más de 40.000 capullos de crisantemos, rosas, claveles y margaritas.
La romería de Garachico o de San Roque: es de las más importantes y se celebra ya en pleno verano, el 16 de agosto. Una auténtica fiesta en la que la imagen de San Roque es acompañada hasta la ermita acompañada por una banda de música, carretas de animales enjaezados, rondallas y parrandas. En el mar, los pescadores acompañan al Santo en una romería marítima.
Una nueva perspectiva para conocer Tenerife, viéndola y viviéndola como un auténtico tinerfeño más.
Más información: Comunicación Turismo de Tenerife.