Tarazona estrena una nueva ruta medieval

La ubicación de Tarazona era realmente estratégica durante el medievo y es que estaba situada entre los reinos de Castilla, Aragón y Navarra, por eso el lema de esta nueva ruta medieval es ‘Amor y guerra en tierra de frontera’; su itinerario nos permite recorrer la historia medieval de esta bella localidad de Zaragoza, que es Patrimonio de la Humanidad y en la que hoy viven once mil personas, desde el año 714 hasta el S.XV a través de los vestigios que quedan de ella: casas colgadas, murallas, antiguas mezquitas, una judería, una catedral, palacios, iglesias… Pero ¿cuáles son los lugares más emblemáticos de esta nueva ruta medieval de Tarazona?

El primer lugar a visitar es el Palacio Episcopal, que llama la atención por su fachada volada hacia el río; se trata de aun antigua fortaleza musulmana que fue después castillo medieval y finalmente palacio renacentista; la segunda y tercera parada de esta ruta son dos iglesias, la primera de ellas ubicada muy cerca del Palacio Episcopal, nos referimos a la Iglesia de Santa María Magdalena, que fue iglesia principal en la época visigoda, después mezquita en tiempos de la dominación árabe y que se reconstruyó como iglesia en el S.XIV; y a la Iglesia de San Miguel Arcángel que fue primero una mezquita construida por los musulmanes y que fue convertida en templo cristiano en el S.XIII.

En una localidad de frontera como era Tarazona las murallas defensivas eran esenciales, se conservan de la compleja estructura algunos tramos de muro y dos torreones; y de las murallas nos vamos la judería (el barrio judío) porque allí están las casas colgadas, unas edificaciones construidas en saledizo en las que vivían durante la Edad Media algunas familias nobles.

¿Sabías que el patrón de Tarazona es San Atilano? Pues así es, y es así porque San Atilano nació en Tarazona en el año 939 como hijo de una familia noble y llegó a ser obispo de Zamora; en la que fuera su casa construyó una ermita en su honor en el S.XVIII, una construcción que fue restaurada a lo largo del S.XX; ya en el S.XXI, concretamente en 2006, fue convertida en un espacio cultural polivalente.

La Iglesia de Nuestra Señora de la Merced, que fue antes convento de los frailes mercedarios, es nuestra siguiente parada y foto, justo antes de llegar a la Ermita de San Juan Bautista, un pequeño edificio excavado en la roca del que se han perdido los elementos medievales aunque se sabe que ya existía en aquella época. Llegamos al S.XIV, un tiempo en el que solían colocarse cruces en los cruces de caminos (valga la redundancia…), el más notable de Tarazona es el Crucifijo Humilladero, que era de los que estaban cubiertos por un templete y se utilizaba como lugar de ajusticiamiento.

Los dos lugares que completan la ruta son también construcciones religiosas, por una parte la Iglesia y claustro San Francisco de Asís y por el que pasa por ser el edificio histórico más importante de Aragón: la Catedral de Nuestra Señora de la Huerta. Cuentan que fue el propio san Franciso de Asís quien pasó por Tarazona camino de Santiago de Compostela en 1214 y fundó una congregación, el convento se levantaría unos años más tarde. La Catedral de Tarazona por su parte es un edificio imponente y muy original porque luce estilo gótico francés y también mudéjar, además cuenta con elementos renacentistas y guarda pinturas del S.XVI de fama internacional. Esta catedral fue, en origen, el primer monumento gótico de la Península Ibérica (allá por el año 1235).