RESTRICCIONES
Casi el 30% de los coches españoles verán cómo, a lo largo de 2023, las cosas cambian para ellos. Ya no podrán circular con la misma libertad que antes, es posible que encuentren ciertas limitaciones a la hora de aparcar en determinadas áreas de su ciudad… Y todo se debe a una medida y a una razón: te contamos cuáles son y, de paso, te desvelamos si afecta a tu vehículo.
2023 arrancó con una obligación para todas las localidades de más de 50.000 habitantes, que va a afectar a un considerado número de vehículos que circulan por España: concretamente a 7,5 millones. ¿Cuál es ese motivo? Y, sobre todo, ¿qué modelos están en la diana y por qué razón? Resolvemos todas estas dudas con cifras.
Por si hay algún despistado en la sala, vamos a recordar en qué consisten las Zonas de Bajas Emisiones. Las ciudades con más de 50.000 habitantes, los territorios insulares y los municipios de más de 20.000 habitantes que superen los valores límite de contaminantes regulados tienen que crear su propia ZBE: un área donde la circulación de determinados vehículos estará restringida o limitada para mejorar la calidad del aire y mitigar el cambio climático. El plazo para activarlas finalizará con 2023.
Los coches españoles
Basándose en los datos proporcionados por Ideauto, el Círculo Neutral in Motion (NIM) ha hecho las cuentas: el 29,5% de los coches españoles no podrán entrar a esas ZBE, es decir, 7,5 millones de vehículos. El 34,5% podría encontrarse con alguna limitación, puesto que lucen la etiqueta C y el 31,2% hace lo propio con la B. Solo el 4% son Eco y un 0,9% son Cero.
¿Por qué no podrán entrar a las ZBE? Por su antigüedad. Según Ideauto, la edad media de los coches que circulan por las calles y carreteras españolas es de 13,9 años. Una cifra que deja a España entre los países cuyo parque automovilístico figura entre los más viejos de Europa, donde la media es de 11,5 años. Los más longevos son Lituania (17,0), Rumania (16,9) y Estonia (16,7): no estamos tan lejos de ellos.
Un rejuvenecimiento ausente
Desde el NIM (donde están integradas las principales asociaciones de automoción y vehículos de España como Aedive, AER, Anesdor, Anfac, Ascabus, Faconautom Feneval, Ganvam y Sernauto) han alzado la voz para intentar solucionar este problema apostando por el rejuvenecimiento del parque automovilístico español: “Un vehículo de 20 años contamina tanto como cinco coches nuevos de la misma tecnología y combustible”. En nuestro país, los vehículos más antiguos no se achatarran: el 23% del parque automovilístico tiene más de veinte años y el 47,2% supera esos quince años.
Sobre la mesa han puesto algunas medidas que podrían ayudar a reducir todas estas cifras: desde ayudas directas para comprar vehículos nuevos o que tengan menos de cinco años hasta exenciones fiscales, pasando por recuperar la reforma de la fiscalidad en el mundo del motor para, por ejemplo, cambiar algunos impuestos como el de matriculación.