NO LO OLVIDES

En los atascos, ¿es obligatorio guardar la distancia mínima de seguridad?

Uno de los consejos más útiles que tenemos para evitar cualquier incidente en un atasco consiste en aumentar la distancia de seguridad respecto al vehículo que nos precede. Así lo establece la DGT.

Las congestiones en el tráfico son uno de los grandes males de los conductores. Estos provocan que algunos usuarios pierdan la paciencia, olvidando o incluso pensando que hay normas que ya no deben cumplir. Cuando se produce un atasco, ¿debemos mantener la distancia mínima de seguridad?

En un atasco, los vehículos tienden a reducir el espacio entre ellos, acercándose hasta casi rozar al vehículo delantero. Este simple gesto aumenta el riesgo de tener un accidente. Es por ello que no solo debemos mantener la distancia de seguridad, sino que es obligatorio. No cumplir con esta distancia puede conllevar una multa de hasta 200 euros y la pérdida de cuatro puntos.

Uno de los consejos más útiles que tenemos para evitar cualquier incidente en un atasco consiste en aumentar la distancia de seguridad respecto al vehículo que nos precede, según afirma Tráfico. De hecho, se estima que es recomendable dejar un espacio de 2 segundos con el automóvil en condiciones climatológicas normales.

Cómo calcular la distancia de seguridad

Según recomienda la DGT, para calcularla, tome como referencia un punto fijo en la vía y cuente dos segundos –pronunciando 1101, 1102...– desde que pase el vehículo con el que guardar la distancia hasta que llegue el suyo. Pero si las condiciones meteorológicas son malas o el firme está mojado, prolongue la cuenta hasta los tres o cuatro segundos. Esta separación le dará cierto margen para mantener la distancia con el vehículo que le sigue.

Por otra parte, cuando se aproxime a la retención, adapte su velocidad: deje de acelerar y pise el freno aumentando progresivamente la intensidad sobre el pedal. Así también advertirá a los conductores detrás de usted para que también reduzcan la velocidad. Además, consumirá menos combustible y evitará desgastes prematuros de las piezas del embrague.

Dentro el atasco, use el embrague solo cuando sea necesario –antes de detenerse y para reanudar la marcha– y suelte el pedal con suavidad, evitando tirones. No conviene mantener el embrague pisado y la marcha engranada: desgastará la mecánica innecesariamente.

Al reanudar la marcha, aunque la congestión parezca desvanecerse, ¡mucho cuidado! En esta situación, nunca acelere bruscamente para recuperar tiempo perdido: el atasco puede reaparecer más adelante. En su lugar, acelere un poco menos que el vehículo que va delante: esto le ayudará a mantener la separación y dosificar las frenadas.