Conductor de transporte internacional: ellos son así y esto es lo que ganan

El sector del transporte y la logística atraviesa una de las situaciones más complicadas de su historia dada la divergencia entre la oferta de trabajo que existe para conducir camiones de gran tonelaje durante largas distancias y la demanda que tiene el mismo. Esta escasez de profesionales en una industria esencial para la cadena de distribución de cualquier bien tuvo su germen en el auge del comercio online y del teletrabajo, al tiempo que se denigraba una labor fundamental, aunque bastante dura pese a estar mejor retribuida que la mayoría.

Actualmente, el déficit de personal para pilotar estos vehículos de mercancías (sobre todo tráiler semirrígido) se estima de casi 200.000 puestos que las empresas necesitan cubrir de forma urgente para acometer efectivamente sus operaciones sin que existan retrasos y sobrecostes que se repercutan en el precio final de los productos enviados por carretera. En un momento como este, con los sueldos al alza, hacerse camionero puede resultar muy atractivo, pues para ello sólo se requiere obtener el carnet pertinente y aceptar la idea de pasar horas, días o semanas recorriendo kilómetros lejos de casa.

A continuación puedes leer una descripción, mediante media docena de puntos clave, sobre todas las funciones y las condiciones que tiene un conductor profesional de transporte internacional de mercancías. Si no estás familiarizado con esta tarea tan vocacional, es probable que algunas características del trabajo en cuestión te resulten curiosas, pero debes saber que alrededor del 70% de las compañías dedicadas a esta actividad precisan con dramática inmediatez perfiles como el siguiente pagando, por si era poco, una remuneración muy competitiva. ¿Te animarías?

• Deber o misión principal: garantizar el transporte seguro y puntual de mercancías.
• Retos: presión o estrés por plazo de entrega y fatiga tanto mental como física.
• Cualificación: permiso C+E, curso de PRL y posibles capacitaciones específicas.
• Responsabilidad 1: cumplir la normativa nacional e internacional en los trayectos, como reglamentos de circulación, restricciones por descanso y límites de tacógrafo.
• Responsabilidad 2: velar por la integridad de la carga con base en varios protocolos.
• Responsabilidad 3: gestionar documentos como albaranes o contratos de seguro.
• Responsabilidad 4: coordinación con operador y cliente, siendo recomendable las nociones más básicas e imprescindibles de inglés, entendido como idioma mundial.
• Salario medio: retribución básica de unos 2.500 euros brutos al mes sin contar las habituales horas extra ni los generosos complementos por trabajar en festivos o en determinadas regiones europeas. No es extraño llegar a duplicar el sueldo estándar.