Algunos fabricantes deciden no ponerlo
Los parabrisas son un elemento fundamental para la seguridad de nuestros coches, pero hay algunos casos en los que no cuentan con un limpia trasero.
En época de lluvia, los limpiaparabrisas permiten la visibilidad en la carretera. Éstos eliminan el agua de los cristales delanteros y traseros, gracias a unas escobillas de goma, y facilitan una conducción más segura.
Sin embargo, hay algunos coches que no cuentan con limpiaparabrisas trasero (el delantero es obligatorio). Estos coches suelen tener una carrocería de cuatro puertas, y hay varios motivos por los que pueden no tener un limpiaparabrisas trasero. Son los conocidos como sedanes o berlinas.
Este tipo de coches cuentan con una luna trasera bastante grande, por lo que el limpiaparabrisas tendría que ser grande también, y dificultaría la estética del coche. Además, dada la inclinación con la que cuenta el cristal, permite que el aire elimine las gotas de agua y no sea necesario utilizar el limpiaparabrisas.
Otra de las razones es, simplemente, un ahorro de costes en la fabricación del vehículo. Al no fabricar una pieza, puede abaratar el producto final.
[[H3:Por si no lo sabías… ¿para qué sirven los puntos de colores en el limpiaparabrisas?]]
En los limpiaparabrisas de los coches modernos se puede observar un pequeño círculo, de color amarillo o rojo, al final de cada escobilla. Esto es un testigo que avisa si el limpiaparabrisas está desgastado y toca cambiarlo. Al principio, el color es negro, y no se puede ver a simple vista pero, según se va desgastando, la tonalidad cambia a un amarillo y, más tarde, al rojo, que indica que es el momento de cambiar el limpiaparabrisas.