Viajemos en el tiempo a aquellos años dorados que conocemos como los Grupo B, máquinas creadas casi sin límites que llevaron al automovilismo de competición a un estatus que nunca jamás ha podido recuperarse en pos de la seguridad y la cordura. Pero de la desaparición de los legendarios
coches del Grupo B nos quedan vestigios como este vídeo publicado por el propio
circuito de Nürburgring, con una
pista completamente nevada y sin tráfico alguno para demostrarnos de qué eran capaces estos coches. El
Porsche 911 SC RS de Rothmans fue uno de los grandes de aquella época dorada, diseñado para competir en rallies de todo tipo como uno de los pesos pesados. Este 911 fue un cóctel creado a partir de elementos de otros Porsche como el 911 Turbo, del que tomaría el chasis reforzado, o el mismísimo 917, del que tomaría el equipo de frenos.
Su motor 3.2 derivado de los Porsche Carrera alcanzaba los 255 CV para mover apenas 960 kilogramos de peso. Para satisfacer la normativa FIA que regulaba aquellos Grupo B,
se llegaron a fabricar 20 unidades que a día de hoy están muy cotizadas. El binomio Porsche 911 y Rothmans siempre fue un referente, y hoy podemos ver en acción a su estrella sobre un helado infierno verde.