El Basilea encuentra su billete para octavos de final en Lisboa

El Basilea sacó una solvente victoria del Estadio de la Luz (0-2) gracias a los goles del noruego Elyounoussi y del suizo Oberlin y certificó así su pase a octavos de final de la "Champions" como segundo del grupo A. Los suizos consiguieron la victoria gracias a su efectividad ante la portería y a pesar de que el Benfica llegó más veces a puerta, pero las "águilas" no tuvieron puntería y cosecharon su sexta derrota en la competición, lo que las deja fuera de las competiciones europeas.

El interés por el partido no podía ser más dispar. Mientras que el Benfica afrontaba una despedida segura de Europa esta temporada -ni siquiera aspiraba a la Liga Europa- contra el equipo que le había endosado un vergonzoso 5-0 en Suiza, el Basilea se jugaba el pase a octavos y necesitaba ganar para depender de sí mismo.

La motivación de ambos se hizo evidente en los primeros compases del encuentro y el Basilea se adelantó a los seis minutos. Michael Lang avanzó por la banda derecha y, sin oposición, puso un centro para el remate de cabeza de Elyounoussi, que batió con facilidad al joven belga Svilar, que volvía a la portería encarnada. Tras unos minutos de titubeo, el Benfica recuperó la garra y se lanzó a por la igualada.

Presionando cerca de la meta rival, encadenó varios saquees de esquina en los que el brasileño Jardel estuvo a punto de sacar petróleo, pero las "águilas" pecaron de poca puntería.

El Basilea se limitaba entretanto a esperar al rival, bien plantado en el césped, y confiando en poder aprovechar un contraataque. La segunda parte arrancó con los suizos todavía más necesitados de la victoria, con la noticia de que el CSKA de Moscú se había adelantado en Old Trafford.

Pero los lisboetas seguían empeñados en dominar el ritmo del partido y encontrar el gol, que estuvo cerca de llegar con un remate de João Carvalho que se fue por un lado y otro intento de cabeza de Lisandro López que tampoco llegó a buen

A pesar de que el Benfica rondaba mucho más la portería contraria, la historia de la primera parte se repitió y les faltó la efectividad que tuvo el Basilea, que aumentó su ventaja en el 65 con un gol cocinado enteramente por jugadores suizos.

Zuffi lanzó una falta desde la izquierda, colocó la pelota en el segundo poste para que Akanji cabeceara y Oberlin, desde el centro y sin oposición de ningún defensa local, remató también con la testa para hacer el segundo.

A partir de ahí, los suizos defendieron con seguridad el resultado ante un Benfica que demostró que tenía el corazón en el juego pero no utilizaba la cabeza para intentar llegar al gol, e incluso estuvieron cerca del tercero en el descuento con un balón de Steffen que se fue alto.

El Basilea dejó así un aviso sobre su solvencia y efectividad a su futuro rival en octavos, mientras que los de Rui Vitória cierran un paso decepcionante por las competiciones europeas, con seis derrotas y apenas un gol a favor.