Oslo, Lillehamer, Roros, Trodheim y Henningsvaer
Nos encanta el mar y el verano pero, cuando llega el mes de diciembre y pensamos en la Navidad, no importa cuánto o cuán poco nos guste esquiar, pensamos en una blanca Navidad como la que evoca el famoso villancico y, puestos a pasar unas navidades blancas, te proponemos que viajes a Noruega porque es el los países nórdicos donde más y mejor disfrutarás de una Navidad tradicional, es decir, blanca.
Claro que Noruega no es un país pequeño ¿dónde ir? no te sorprenderá que te recomendemos Oslo siendo como es la capital del país, pero te recomendaremos otros cuatro destinos, alguno de ellos muy cercano a Oslo, atento:
Oslo
La decoración de las calles de la ciudad por sí sola hace que visitarla en los días previos a Navidad o en plenas fiestas se convierta en una experiencia inolvidable; su mercado navideño, Winter Wonderland es uno de los más bellos de Europa, allí no sólo encontrarás estupendos recuerdos navideños sino que también podrás descubrir a qué sabe el glogg (algo así como un vino caliente con especias que espanta al frío).
¿Más planes en Oslo? desde patinar sobre hielo hasta unas cuantas vueltas en la noria o deslizarte en trineo sobre la nieve de Korketrekkeren (a solo 20 minutos del centro de la capital) hasta recorrerte otros mercadillos navideños como el del Museo del Pueblo Noruego.
Lillehamer
A tan solo hora y media en tren desde el aeropuerto de Oslo, Lillehamer es la ciudad perfecta para quienes quieren asegurarse la nieve en Navidad, de hecho esta ciudad es destino habitual de esquiadores y, aunque no tengas espíritu de esquiador, puedes subir en el telesilla a o alto de las instalaciones de saltos de esquí y disfrutar de magníficas vistas.
En el centro de la ciudad verás la Navidad con ojos de otros tiempos, son de visita obligada el Museo al aire libre de Maihaugen porque cuenta con su propio mercadillo de Navidad, el museo de arte de Lillehammer y el espacio creativo Fabrikken, sus artistas y artesanos crean piezas que te enamorarán.
Roros
Roros es una antigua ciudad minera de casas de madera tan bien conservada que su centro está considerado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, aquí la Navidad es de postal; si algo hay en Roros son pequeñas tiendas de artesanos así que prepárate a hacerte con mil y un recuerdos y regalos únicos y también a degustar delicias nórdicas como la carne reno y a descubrir a qué saben las cervezas artesanas noruegas.
Trodheim
Es la tercera ciudad más grande del país, si algo no te faltará aquí son lugares que ver y visitar, desde los museos de arte (algunos de los más importantes del país están aquí, como el Museo de Arte de Trodheim, especializado en arte noruego, o el museo Nordenfjeldske Kunstindustrimuseum, especialzado en diseño y artes decorativas) hasta su magnífica zona de tiendas y compras. Además en Navidad es famoso su concierto de Navidad en la Catedral de Nidaros.
Henningsvaer
Esta localidad está en Lofoten y eso es tanto como decir que, además de nieve y hielo, aquí se disfruta de las auroras boreales; además es un lugar perfecto para comprar algunos regalos porque, aunque se trata de un pueblo de pescadores, hay también un interesante gremio de artesanos especialistas en el soplado del vidrio, la fabricación de velas y el diseño de gorros de lana.
En esta localidad hay varios museos interesantes como el KaviarFactory o La Gallerie Lofotens Hus, además puedes pasar una noche en las cabañas de pescadores junto a la costa u organizar una excursión al Museo vikingo Lofotr, en Borg.
Si bien es en la localidad finlandesa de Rovaniemi donde se supone que Santa Claus tiene su oficina, los noruegos insisten cada año en que en no es la única que ha abierto el famoso Papá Noel, tiene otra en la calle Nissegata del pueblo de montaña noruego Savalen; allí encontrarás una oficina de correos de Santa Claus y también la casa de jengibre más grande del mundo… ¿nuestra recomendación? que seas realista… una blanca Navidad es por encima de todo una Navidad fría así que no dejes de visitar algún spa balneario para recuperarte de las bajas temperaturas.
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