Europa
La isla de Sicilia, en Italia, ha sido protagonista de una fascinante mezcla cultural. Gobernada por asiáticos, africanos y europeos dicen de ella que fue la primera sociedad multicultural del mundo. Treinta siglos de historia se expresan en el Clásico, el románico, el gótico y el barroco. Sicilia es una isla única, llena de arte, arqueología, historia, folklore y un espectacular paisaje. Y la gastronomía, por supuesto, la cocina siciliana, con vestigios e influencias de todas las culturas que se establecieron en la isla, la cocina mediterránea por excelencia. Un aliciente más para decidirse a visitar uno de los destinos más solicitados. Sicilia toma el sol y disfruta de playas doradas, con aguas cristalinas, y huertos de naranjos y limoneros, majestuosas montañas, sus volcanes, el Strómboli y una de las maravillas de la naturaleza, el Monte Etna, majestuoso. Cada región ofrece algo diferente. En el noreste bosques frondosos, en el centro viñedos, olivos centenarios, almendros y campos de trigo. Durante el verano, la tierra es de color ámbar bajo un cielo de azul. Sicilia con su amplia oferta histórica y cultural, y sus precios aún asequibles, invita a soñar. Separada del continente por el estrecho de Messina y bañada por el Mar Jónico, el Mar Tirreno y el Mediterráneo es una de las joyas de Italia. Hay mucho que ver en Sicilia y merece la pena perderse por la isla y recorrer su accidentada e intrincada geografía. Aún así proponemos una ruta que nos permitirá disfrutar de unos intensos días sin perdernos lo fundamental. Palermo, Agrigento, Ragusa, Siracusa y Taormina. Ahora es un buen momento para visitar Sicilia, sin el calor del verano, descubrir la parte más histórica y cultural es una experiencia única. Imágenes Fototeca Enit.