TURISMO DE LUJO
Yeda, la segunda ciudad de Arabia Saudí, es también un destino de lujo.
Yeda pasaba por ser la visita obligada en Arabia Saudí para los amantes del patrimonio histórico y cultural porque allí se conservan vestigios históricos de primer nivel, tanto es así que el casco antiguo de la ciudad ha sido reconocido por Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Quizá esa fuera la razón, su riqueza patrimonial, por la que Yeda comenzó a crecer como destino cultural, las 10 casas antiguas (antiquísimas…) del casco antiguo o la muralla de 8 puertas que rodea la ciudad, además de su mercado popular, eran un atractivo irresistible.
Pero es que Yeda no es solo una ciudad histórica, es también una ciudad moderna, algo que se puede descubrir bien en el Corniche, el paseo marítimo que bordea la costa y nos permite maravillarnos ante el Mar Rojo gozando de una rica propuesta gastronómica; en ese mismo paseo marítimo hay otro cultural de gran interés, el Paseo del Arte.
Esa confluencia de lo viejo y lo nuevo ha hecho que el desarrollo turístico de Yeda tome los derroteros clásicos de los grandes destinos árabes: el lujo. En la ciudad se han inaugurado, en un lapso de tiempo relativamente corto, varios hoteles de lujo, a cada cual más lujoso y es que forman parte de algunas de las cadenas hoteleras de lujo más famosas del mundo: Yeda cuenta con su St Regis (el St. Regis Red Sea Resort), también con su Six Senses (el Six Senses Southern Dunes) e incluso con un Ritz Carlton, el Najuma.
Claro que el lujo no se define solo en las estrellas del hotel en que te alojes sino también en las experiencias que disfrutes; algunas serán gastronómicas, otras de bienestar y no faltarán las que se sucedan gracias al Mar Rojo porque es uno de los mejores lugares del mundo para bucear y descubrir no solo uno de los arrecifes de coral más grandes y menos explorados del mundo sino algunas de las centenares de especies marinas que viven en él o cerca de él (desde tortugas carey a delfines, aves marinas, tiburones y más de 280 especies de peces).