VALLADOLID
Valladolid no es solo una ciudad preciosa, es monumental e histórica, fue incluso sede de la Corte allá por el S.XVII y por ahí, precisamente, vamos a empezar.
Corría el año 1601 cuando Valladolid se convirtió en sede de la Corte, lo fue durante un periodo breve, apenas cinco años, pero la relación de la ciudad con la realeza ni empezó en 1601 ni acabó en 1606, mucho de esa relación podrían contarnos las paredes del Palacio Real si hablasen porque por él pasaron Carlos I, Felipe II y Felipe III, además allí nació Felipe IV y llegó a ser ocupado por Napoleón cuando al francés se le ocurrió invadir España.
Claro que el Palacio Real de Valladolid no es, ni de lejos, el único edificio histórico y monumental de la ciudad: la Catedral (popularmente conocida como la Inconclusa porque aunque comenzó su construcción en el S.XVI, sigue sin terminar), la famosa Plaza Mayor, tan parecida a la de Madrid, la iglesia de San Pablo o la de Santa María la Antigua, la universidad… y por supuesto la Academia de Caballería, un precioso edificio centenario, que es además el más fotografiado de la ciudad.
El Palacio Real de Valladolid es de estilo renacentista y comenzó a construirse en el S.XVI; la razón de que se decidiera levantar este imponente palacio fue de lo más práctica: los reyes estaban mucho en Valladolid y no contaban con una residencia adecuada, es más, solían alojarse en casas de otros nobles sin tener ni tan siquiera residencia propia hasta que utilizaron el palacio De Francisco de los Cobos para tal fin.
¿Lo más destacable de este palacio además de su fachada? Sus dos patios, uno que llama la atención por sus dos pisos de arcos y otro por su arquería de medio punto y por la fuente de mármol decorada con sirenas que ocupa su parte central; también la notable escalera principal que fue diseñada y construida por Ventura Rodríguez, se cree que a imagen y semejanza de la del Alcázar de Toledo.
El de la Academia de Caballería es un edificio bastante más moderno que el Palacio Real, fue construido de hecho a principios del S.XX aunque también por razones muy prácticas: desde mediados del S.XIX se instaló en Valladolid la Academia del Arma de Caballería, lo hizo en un edificio que se incendió, lo que obligó a la construcción de la Academia actual, un edificio de estilo neoplateresco y con una fachada con tres torres realmente espectacular.
¿Lo más interesante de la Academia de Caballería además e su espectacular arquitectura? Su museo, un museo en el que podrás ver la que pasa por ser la única máquina Enigma (¡auténtica!) que se conserva en nuestro país (sí, sí, la que se utilizaba para cifrar mensajes durante la II Guerra Mundial) u objetos tan curiosos como una máscara de gas para caballos.