El campeón de 2017 ganó en Motegi y se mete en la pelea por el título
La victoria de Ishiura fue uno de los temas de conversación de un paddock que recibió a un ‘Doctor Marko’ que se interesa en el campeonato.
La Super Fórmula se anima y tras la quinta ronda de la temporada, tres pilotos se mantienen con sus opciones de título intactas. A Naoki Yamamoto y Nick Cassidy, únicos ganadores de carreras antes del pasado fin de semana y principales candidatos al título, se les une un Hiroaki Ishiura que hizo valer su condición de actual campeón para vencer una estratégica carrera en Motegi que le mete de lleno en la pelea por una nueva corona. Entre tanto, el paddock estuvo pendiente también de la visita de un Helmut Marko que promete una importante presencia de Red Bull en Japón en un futuro muy próximo.
El fin de semana comenzó de la mejor manera posible para Hiroaki Ishiura, autor de la pole y propietario del punto que se reparte el sábado por firmar el mejor tiempo. Tras él, tres motores Honda mostraban el buen rendimiento de un propulsor que a lo largo de los últimos años ha estado algo por detrás de Toyota, con Tomoki Nojiri y Nobuharu Matsushita por delante de un sorprendente Narain Karthikeyan. Nick Cassidy era quinto, por delante de su compañero en Kondo Racing, Kenta Yamashita. El líder de la general, Naoki Yamamoto, 'solo' podía ser séptimo en una cita en la que no estaban ni Kazuki Nakajima ni Kamui Kobayashi, ocupados con el WEC en Silverstone.
En su lugar, João Paulo de Oliveira y Yuichi Nakayama tomaron sus volantes en TOM’S y KCMG respectivamente, aunque ninguno de los dos fue protagonista el sábado o el domingo. En cuanto a los pilotos poco usuales, Nirei Fukuzumi volvió tras ceder su volante a Sena Sakaguchi y Dan Ticktum en las carreras que coincidían con la Fórmula 2. Finalmente, Tom Dillmann disputó la que debería ser su última carrera japonesa del año antes de que vuelva Pietro Fittipaldi.
La carrera estuvo marcada por la estrategia, con diferentes compuestos de neumáticos para empezar la carrera y distintos números de paradas para los pilotos que terminaron en el podio. De esta forma, un encendido Nobuharu Matsushita comenzó liderando la carrera tras superar a Hiroaki Ishiura pero una parada demasiado temprana permitió que el actual campeón completara un ‘overcut’ y lograra recuperar la primera posición tras las paradas en boxes. De forma parecida, Nick Cassidy centró su estrategia en un fuerte final de carrera que le permitió ser tercero. Mientras tanto, el segundo puesto fue para un Ryo Hirakawa que optó por arriesgarse e ir a dos paradas, lo cual resultó exitoso.
Tanto Hirakawa como Kazuya Oshima fueron los grandes protagonistas de la carrera, remontando ocho y nueve posiciones respectivamente gracias a una estrategia de dos paradas bien temporizada que les permitió correr sin nadie delante durante buena parte de la carrera. En el caso de Oshima, tuvo que ganarse el resultado pero tras varios audaces adelantamientos, fue quinto, con un Matsushita que sumó sus primeros puntos al ser cuarto. Gracias a la victoria, Ishiura es tercero en la general, empatando a puntos con Yamamoto y a tres del nuevo líder, un Cassidy que celebró de la mejor manera su cumpleaños.
La carrera tuvo suficiente interés para brillar sin ayudas externas, pero sin duda el punto más intrigante del fin de semana lo protagonizó Helmut Marko, invitado sorpresa en el circuito de Motegi, sobre todo teniendo en cuenta que el GP de Bélgica de Fórmula 1 se disputa este fin de semana. El austriaco se mostró muy interesado en la Super Fórmula, su ambiente, el monoplaza usado actualmente y el futuro de un certamen que podría ser clave para el Red Bull Junior Team. Marko quedó muy impresionado con el Dallara SF14, sobre todo con su paso por curva, y mostró mucho interés en lo que podrá hacer el SF19 que se estrena en 2019.
De hecho y aunque se entiende que hay un cierto punto de miel en sus palabras con respecto a sus anfitriones japoneses, Marko afirmó valorar de forma muy positiva lo difícil que parece sacar el máximo rendimiento de los coches de Super Fórmula, calificando el campeonato como un lugar idóneo donde formar a jóvenes talentos. Evidentemente, uno de sus puntos de interés fue el de seguir a los pilotos japoneses apoyados por Red Bull, Nirei Fukuzumi y Ryo Hirakawa, pero tuvo algunas palabras con respecto a lo que puede llegar en el futuro.
Según Marko, pretende tener a dos pilotos del Red Bull Junior Team en la Super Fórmula en 2019. Teniendo en cuenta que Dan Ticktum disputó dos carreras este año, parece ser el candidato ideal. Por detrás, los demás pilotos apoyados por la marca de bebidas energéticas están en Fórmula Renault 2.0 o Fórmula 4, por lo que no estarían aún listos para subir. Esto implica que Nirei Fukuzumi podría pasar a formar parte oficialmente del programa de desarrollo… o que podría haber algún fichaje interesante que se sumara al proyecto japonés.
En ese sentido, la gran carrera de Ryo Hirakawa y la más que real posibilidad de que lograra terminar la temporada con suficientes puntos como para obtener la Superlicencia para la Fórmula 1 le convierten en un posible candidato para Toro Rosso de cara a 2019. ¿El principal escollo? Hirakawa es piloto Toyota y un paso en la dirección de Honda sería irreversible para sus aspiraciones nacionales. Más allá de la Super Fórmula, en la que podría participar un equipo Red Bull independiente de las estructuras de Honda ya existentes, Marko reconoce que se está valorando apoyar al Super GT. Quizás su cercanía con el DTM hace que sea el momento idóneo para ello…