El SsangYonXLV es un modelo que deriva directamente del Tivoli aunque crece en tamaño para convertirse en una alternativa a los monovolumen de tamaño compacto. A Europa llega con un interior apto para cinco ocupantes. Si bien su diseño es parecido al Tivoli hasta el pilar B, de ahí para atrás todo es nuevo destacando el enorme voladizo posterior. Respecto al modelo original crece en 24 cm hasta alcanzar una longitud total de 4,44 metros. Esta ganancia llega en su totalidad al maletero y crece hasta los 720 litros con cinco plazas útiles.
SsangYong no quiere situarlo en un segmento concreto para evitar encasillarlo, de modo que
los interesados en un MPV o en un crossover podrán ver en el XLV una alternativa interesante.
Estéticamente incluyen detalles propios de los SUVS, como las molduras plásticas, los protectores de bajos o las barras de techo. En los más equipados también incluyen llantas de aleación de hasta 18 pulgadas que ponen la nota dinámica al conjunto.
En el interior el salpicadero es igual al del Tivoli,
destacando por una distribución lógica de todos los mandos. La calidad de realización es correcta, haciendo uso de plásticos acolchados en las zonas superiores. La consola central puede contar
con una pantalla táctil de siete pulgadas desde la que se controlan el sistema de audio y el navegador si se equipa. La instrumentación tiene un toque deportivo y se puede cambiar el color de fondo (hay seis tonos diferentes).
La dotación disponible contempla el
climatizador automático, techo solar deslizante, tapizado en piel, asientos térmicos, sensor de lluvia, acceso sin llave, arranque por botón, cámara trasera, antinieblas y control de crucero. La oferta de motores está formada por el bloque de gasolina de
1,6 litros y 128 CV, y un diésel con idéntica cilindrada pero con 115 CV. En ambos es posible añadir el sistema de tracción total a las cuatro ruedas y el cambio automático aunque depende del país en el que es comercializado.