UN CONSEJO ESTIVAL
Los viajes por carretera se multiplican en verano, por lo que la seguridad a bordo de nuestro coche es aún más prioritaria que de costumbre. La DGT lanza un consejo que puede ser vital.
El cinturón de seguridad, uno de los elementos más importantes en el terreno de la seguridad vial, supuso una auténtica revolución en la protección de los ocupantes de vehículos y ha desempeñado un papel crucial en la reducción de lesiones en accidentes de tráfico. Este dispositivo, diseñado para ajustarse al cuerpo de los ocupantes, reduce drásticamente el riesgo de lesiones graves y mortales al mantenerlos en su posición y distribuir las fuerzas del choque de manera más efectiva por todo el cuerpo.
En España, la importancia del uso del cinturón de seguridad ha sido destacada constantemente por las autoridades de tráfico y organizaciones de seguridad vial. Su utilización es obligatoria para todos los ocupantes del vehícul, independientemente de su posición en el coche, ya que su eficacia se ha demostrado en innumerables estudios y pruebas de choque. A pesar de esta concienciación y de la disponibilidad de leyes que exigen su uso, los índices de utilización del cinturón de seguridad en España han experimentado altibajos a lo largo de los años.
La Dirección General de Tráfico nos recuerda constantemente la necesidad imperante de usar el cinturón de seguridad, y, con motivo de la campaña de desplazamientos estival, ha lanzado un interesante consejo: utilizar el cinturón de seguridad también en la plazas traseras, aunque no haya nadie que ocupe esos asientos. ¿Cuál es el motivo de este peculiar consejo?
La razón es clara: la mayor cantidad de equipaje y bultos que solemos transportar en estos viajes. Y es que si es importante que los ocupantes del vehículo viajen firmemente anclados en sus asientos, no es menos importante que la carga también esté correctamente sujeta para que no se desplace durante el viaje y para que, sobre todo, no salga disparada como un proyectil en caso de sufrir un accidente de tráfico.
De esta manera, en caso de que tengas que llevar bultos grandes en los asientos traseros, deberás abrocharles el cinturón de seguridad para que no se desplacen en caso de colisión. Si, por el contrario, eres capaz de colocar toda la carga en el maletero, tampoco está de más que abroches los cinturones aunque no haya nada ni nadie en los asientos, ya que aumentarás la resistencia del respaldo a desplazarse en caso de una colisión brusca. Recuerda que cuando se sufre un choque, una deceleración súbita por un accidente, el peso de nuestros cuerpos (también de la carga que transportemos) se multiplica por más de 50 veces.