NUEVA VERSIÓN DEL SUV GRANDE DE BYD
BYD se ha convertido en una de las marcas protagonistas del mercado español, y lo ha hecho por méritos propios. Con una carga tecnológica brutal, su gama de modelos se ha basado en plataformas 100% eléctricas, aunque ahora presenta su primer híbrido enchufable para Europa
Si hay una marca que ha conseguido destacar en el mercado español en los últimos meses esa es BYD. El gigante asiático ha irrumpido con muchísima fuerza en nuestro mercado (en general, en el mercado europeo) gracias a una gama muy amplia basada únicamente en mecánicas eléctricas. Con modelos tan llamativos por su relación calidad-precio como el BYD Atto 3 y con otros tan competentes como el BYD Seal, una berlina compacta capaz de plantar cara el mismísimo Tesla Model 3, BYD se lanza ahora a la conquista de los potenciales compradores de híbridos enchufables.
El BYD Seal U no es estricta novedad: se presentó hace ya unas semanas con el planteamiento de un SUV de tamaño medio (mide 4,78 metros de largo) con mecánica 100% eléctrica y una autonomía homologada que ronda los 500 kilómetros. Ahora la firma china ha decidido traer a España una segunda variante del Seal U, bautizada como Seal U DM-i, una versión híbrida enchufable que, estéticamente, es prácticamente idéntica a su hermana 100% eléctrica.
De esta manera, el BYD Seal U DM-i se presenta como un SUV familiar con un aspecto atractivo y equilibrado, alejado de líneas muy marcadas y de trazos "demasiado originales" que podrían llegar a resultar excesivos para sus potenciales compradores. Recordando claramente a su hermana berlina, el BYD Seal, este SUV cuenta con un habitáculo lo suficientemente amplio como para que cinco personas viajen con comodidad, a lo que hay que añadir un maletero de casi 600 litros de capacidad.
Evidentemente, la digitalización es la gran protagonista del salpicadero, con un display digital para la instrumentación y una gigantesca pantalla de 15,6 pulgadas que puede colocarse en posición horizonal o vertical apretando un botón.
Lo verdaderamente interesante de esta variante DM-i se encuentra bajo su capó, ya que el BYD deshecha su mecánica 100% eléctrica en favor de un conjunto híbrido enchufable compuesto por un motor de gasolina de 131 CV situado en posición delantera y desarrollado íntegramente por BYD, al que se le añaden dos motores eléctricos adicionales colocados en ambos ejes. La cifra total de potencia aún no ha sido desvelada, pero con casi total probabilidad rondará los 250 CV.
Estos motores eléctricos están alimentados por una batería de LFP (litio ferrofosfato) con una capacidad de 18,3 kWh, con la que el BYD Seal U DM-i es capaz de homologar una autonomía en modo eléctrico de 70 km. Esta batería, por cierto, puede recargarse tanto en corriente alterna (a 11 kW de potencia máxima) como en corriente continua con picos de potencia de 18 kW, permitiendo así una recarga completa en poco más de una hora.