PAGO POR USO
La idea de posesión cambia poco a poco y tener un coche ya no es una prioridad, aunque sí una necesidad. Eso ha ayudado a que la opción del coche por suscripción haya ganado peso entre los usuarios.
Tener un coche en propiedad es caro: seguros, impuestos, combustible, ruedas, posibles averías, la financiación… Y cada día lo es más con unos precios que no paran de subir. Sin embargo, el coche se ha convertido en una herramienta casi imprescindible para muchos hogares que tienen que hacer malabares para llegar a final de mes. Por eso, los coches por suscripción parecen ser una solución si no ideal, si interesante y, quizá, coherente para muchas familias.
La idea de tener un coche ya no es tan popular como lo era antes. Ahora, los jóvenes prefieren otro tipo de cosas y contar con transporte cuando sea necesario. Eso ha popularizado en gran medida vehículos como los patinetes eléctricos en las grandes ciudades u opciones como el coche compartido y aplicaciones como BlaBlaCar. De esta forma, se cuenta con un transporte algo más personalizado que el tren o el autobús, pero sin sus gastos asociados. Se paga solo cuando se use.
Es una tendencia que podría dar forma a como se mueven las personas. Podría cambiar la forma de viajar o de desplazarse en pocos años, o eso creen algunas voces importantes del sector.
Al parecer, un nuevo estudio europeo estima que para el año 2035, el coche por suscripción, los coches de alquiler y el coche compartido, crecerán un 70%. Es un aumento muy importante, que como cabe esperar, afectará a la manera en los usuarios entiende los desplazamientos y como perciben la propiedad de un coche. Todo ello, afectado, principalmente, por la flexibilidad, la economía y la sostenibilidad. Los nuevos usuarios tienen una mentalidad diferente y otorgan valor a cosas que, nosotros mismos, no valoramos tanto.
El CEO de Bipi, una compañía de coches por suscripción que opera en España desde 2017, dice haber notado un importante aumento del interés por este servicio en España: “Cada vez más conductores valoran la flexibilidad de poder cambiar de coche cada cierto tiempo, poder probar otras opciones por gusto o porque sus necesidades de vida han cambiado”. También afirma que se ha notado un incremento, mucho más alto, en la demanda de vehículos híbridos en el último año. Incluso dan datos: en 2024, los híbridos y los gasolina suponían el 38% de los contratos, actualmente, solo los híbridos copan el 68%”.
Muchos pensarán que no hay nada como tener un coche propio, pero para quien apenas usa el coche, solo supone un gasto innecesario. En las grandes ciudades como Madrid o Barcelona, el coche, en ocasiones, es un castigo por culpa de una circulación densa y lenta, aunque las creaciones de ZBE han ayudado a reducir los coches en circulación. Por eso, en dichos lugares, un coche por suscripción, el cual solo pagas cuando usas, cobra cierto sentido.