DE LLEGAR A PRODUCCIÓN, SERÍA LA 4ª GENERACIÓN
No se han desvelado los datos técnicos sobre su tecnología de impulsión, pero sí los de las dimensiones exteriores del futuro roadster de Toyota que recupera el espíritu del mítico MR2.
Uno de los automóviles deportivos más icónicos de Toyota en toda su historia fue el MR2, un biplaza con motor central-trasero en disposición transversal, alimentado por gasolina, que movía las ruedas posteriores. Fue producido entre 1984 y 2007 durante tres generaciones, aunque sus ventas en Europa (y especialmente en España) fueron casi anecdóticas. Tras 16 años sin un coche similar en su cartera de productos, la marca japonesa ha presentado hace poco un prototipo que recuerda a las proporciones de aquel vehículo y que podría adelantar el diseño de su nueva versión de producción.
Bautizado como Toyota FT-Se, este modelo conceptual tiene un sistema de propulsión totalmente eléctrico, del cual no han trascendido datos técnicos, y un tamaño bastante compacto, pues mide 4,38 metros de largo, 1,90 de ancho y 1,22 de alto, lo cual son dimensiones exteriores parecidas a las de un GR Supra actual. Al igual que este, desde la firma nipona aseguran que su chasis ha sido puesto a punto por el departamento de altas prestaciones del fabricante en cuestión GAZOO Racing, una buena credencial.
Los componentes más importantes del vehículo, empezando por su plataforma, son los mismos que se han empleado en el Toyota FT-3e, otro prototipo que ha sido desvelado al mismo tiempo y en el mismo lugar: el Japan Mobility Show 2023 celebrado en Tokio. Con todo, su aspecto es radicalmente distinto, con una carrocería menos voluminosa y más aristada, así como con un interior sencillo, futurista y centrado en el conductor.
El regreso del MR2 con una cuarta y descontinuada edición sería un sueño para los más nostálgicos de los deportivos de Toyota, completando su gama GR. Sin embargo, habrá que esperar a que los asiáticos ofrezcan más información para ver si un BEV pasional e inspirado en toda una leyenda les convence. Quizá no veamos el definitivo hasta 2026.