El nuevo RAV4 solo estará disponible con un motor híbrido de hasta 222 CV
Toyota renueva su SUV compacto RAV4 y lo apuesto todo al motor híbrido gasolina
Toyota pone a la venta la nueva generación del RAV4, un SUV compacto que acumula ya a sus espaldas nada menos que cinco generaciones convirtiéndolo así en uno de los precursores de esta categoría. Hablamos de uno de los modelos más importantes de la marca a nivel de ventas, así como uno de los coches de referencia en su segmento por ser el primero en defender la motorización híbrida tanto en configuración 4x2 como 4x4.
La anterior generación del Toyota RAV4 ya demostró que el mercado posee un elevado interés en los motores híbridos para este tipo de SUV, algo que se reflejó en las ventas con una importante cuota para la mecánica híbrida. De este modo y aprovechando la caída en desgracia del diésel, Toyota ha decidido apostarlo todo al motor híbrido para confeccionar una gama donde solo encontramos una mecánica híbrida gasolina compuesta por un motor de 2,5 litros atmosférico y un motor eléctrico trabajando de forma conjunta a través de la transmisión e-CVT. Las baterías son NiMh y están alojadas bajo los asientos traseros.
Aunque quizá nos suene esta configuración de motor híbrido de otros modelos de Toyota y Lexus, en realidad estamos ante una planta completamente nueva estrenada por el Toyota RAV4 y disponible en potencia de 218 CV para la versión 4x2 y potencia de 222 CV si optamos por la configuración 4x4. A nivel técnico la posibilidad de escoger el tipo de tracción es la única opción que brinda la gama RAV4.
Si nos centramos en la variante 4x4 nos encontramos con otra de las grandes novedades del RAV4 con respecto a su anterior generación que ya permitía una configuración similar. Con el objetivo puesto en ofrecer un mejor desempeño fuera de asfalto, aunque sin penalizar los consumos, el RAV4 4x4 instala un motor eléctrico independiente en el eje trasero para asistir al eje delantero cuando se detecten pérdidas de agarre. Además, también se añade un modo de conducción específico para el uso offroad denominado Trail Mode, un programa que simula el trabajo de un bloqueo de diferencial, permitiendo así controlar cada rueda de forma independiente para mejorar el agarre.
Durante nuestra toma de contacto con el RAV4 pudimos recorrer diferentes pistas y caminos para poner a prueba la versión 4x4. El resultado fue bastante satisfactorio, pues aunque no hablamos de un coche que ahora ofrezca verdaderas aptitudes todoterreno, sí que ofrece una buena gestión del par que llega a cada rueda. Recordemos que hablamos de un todocamino, por lo que nos aventuramos a recomendar este sistema para aquellos usuarios que van a circular por zonas con gran presencia de hielo, nieve o agua, lugares donde el sistema 4x4 más brillará.
Siguiendo con el apartado dinámico el nuevo RAV4 destaca por ofrecer un alto nivel de confort y estabilidad. Los ingenieros de Toyota han sabido encontrar el difícil equilibrio entre ambos puntos, lo que nos deja con un SUV que asienta bien en curva si balancear en exceso, pero que al mismo tiempo resulta cómodo de conducir en todo tipo de firmes.
Si nos centramos en la mecánicas nos encontramos una de cal y otra de arena. Como suele ser habitual en las mecánicas híbridas de Toyota nos encontramos con una absoluta prioridad por la eficiencia que nos deja con el tacto artificial de su transmisión, una sensación de resbalamiento infinito que hace que la aceleración no sea tan contundente como cabe esperar de sus más de 200 CV. Pero también es justo resaltar que en este nuevo propulsor se ha mejorado mucho la respuesta y el tacto con respecto a anteriores generaciones, lo que hace que tras un periodo de adaptación a su forma de trabajo nos olvidemos. En términos de suavidad y confort nos encontramos con una mecánica de las mejores de su clase, especialmente en ciudad que es donde más y mejor trabaja en pos de la eficiencia.
En lo referente a consumos el Toyota RAV4 homologa unos consumos de 4,6 l/100 Km para la versión 4x2 y 4,5 l/100 Km para la variante 4x4. Hablamos de registros realmente buenos en su categoría que le permiten no pagar impuesto de matriculación gracias a unas emisiones que no superan los 105 gramos de CO2 y además obtener la etiqueta ECO. Durante esta toma de contacto no pudimos obtener datos de consumo realmente objetivos, pero la media global obtenida tras combinar ciudad, autopista, carretera de montaña y trialeras no sobrepasó los 7,8 l/100 Km. Sin duda un dato muy bueno que cumple la promesa de ser una verdadera alternativa al motor diésel.
De puertas hacia dentro el Toyota RAV4 también ha visto grandes cambios. Nos encontramos un habitáculo de diseño sobrio y calidad de construcción notable, con buenos ajustes y materiales en la práctica totalidad de la cabina. El equipamiento disponible es amplio y en su oferta cabe destacar las amplias posibilidades que se brindan en tanto a asistencias a la conducción y seguridad activa desde los acabados más básicos. Como punto a mejorar nos encontramos con un cuadro de instrumentos de tintes clásicos por diseño y funciones, aunque con posibilidad de integrar una pantalla a color de hasta 7”, al igual que un sistema de infoentretenimiento con pantalla táctil de hasta 8 pulgadas que si bien cumple, está lejos de los equipos que ofrecen muchos de sus rivales por conectividad, diseño o posibilidades.
Como no podía ser de otro modo la habitabilidad es uno de los puntos fuertes del RAV4, con capacidad para viajar con 5 adultos de forma cómoda y un maletero de 580 litros de capacidad, ampliable hasta los 1.690 litros. Para los amantes del MTB es importante destacar que desde Toyota prometen que al plegar los asientos traseros existe suficiente espacio como para introducir una bicicleta de llanta de 29” sin necesidad de desmontar las ruedas.
El Toyota RAV4 tiene un precio desde 31.800 euros para la versión de 218 CV con tracción 4x2, precio que sube hasta los 34.800 euros si optamos por la variante de 222 CV con tracción total.