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TEN CUIDADO
Aunque cortarse con papel sea un corte poco profundo, duele más que uno limpio. Provoca irritación en la herida y causa un destrozo en las células y los nervios. A continuación, te explicamos por qué son tan molestos estos cortes.
Seguro que en alguna ocasión te has hecho un corte en la mano con papel o con la página de un libro de manera accidental y te ha dolido bastante. Es lo más habitual y suelen ser cortes no profundos, por lo que apenas sangran, pero no por ello deja de escocer y molestar durante días. Todo tiene una explicación, a continuación, te contamos por qué son tan dolorosos.
Cuál es el motivo
El dolor del corte tiene que ver con la forma que tiene el papel. Aunque a simple vista parezca que el filo de una hoja de papel es recto y liso, en realidad a nivel microscópico se observa que tiene un filo muy irregular. De hecho, si hicieras zoom verías cómo se parece más a una sierra dentada, porque está compuesto por filamentos diminutos que generan el mismo efecto que esta herramienta. Por lo que cuando el papel corta la piel provoca una irritación en la herida por sus componentes químicos y causan un destrozo mayor en las células y los nervios que si fuera un corte limpio.
Tener el mismo corte en el brazo, muslo o tobillo es menos doloroso que en los dedos, ya que tienen mucha sensibilidad y cada dedo tiene más de 3000 terminaciones nerviosas. Además, es la zona del cuerpo donde hay más nociceptores, es decir, los receptores del dolor. Por esta razón, cuando te realizas un corte en esta parte del cuerpo te molesta bastante.
Debes saber que estas heridas no sobrepasan la primera capa de la piel, por lo que no sangra o si lo hace es muy poco. El proceso de cicatrización tarda en comenzar y la sensación de malestar dura más tiempo. Además, si el cuerpo no percibe daño en las capas inferiores a la epidermis tarda en reaccionar. Por esta razón, los cortes suelen molestar durante un tiempo más prolongado.